El mandatario Miguel Díaz-Canel advirtió que Cuba no volverá a una “situación normal” en el corto plazo, ni tan siquiera cuando llegue el próximo 14 de septiembre llegue un barco con combustible para mitigar la crisis energética que atraviesa el país.
"Es preciso tener claro que no estamos en una situación normal y tampoco lo estaremos después del día 15. El día 14 entra un barco con combustible, pero tendremos que alargarlo hasta finales del mes de septiembre", rezó el texto que publicó Granma.
En el arribo de esta embarcación están las esperanzas del gobierno cubano para conseguir paliar la carencia de combustible, que agravado la crisis del transporte y ha dejado largas colas en las gasolineras.
El medio oficialista explicó que el viernes Díaz-Canel realizó visitas a las provincias de La Habana y Mayabeque para evaluar la implementación de las medidas.
"Estamos trabajando con medidas de mitigación, convocando a mucha solidaridad, comprensión y apoyo", afirmó el dirigente, que estuvo acompañado de Salvador Valdés Mesa, primer vicepresidente de los Consejos de Estado y de Ministros.
También aprovechó para reiterar su discurso de los últimos días en los que dijo que se trata de una "situación coyuntural". En sus últimas intervenciones también ha defendido que el gobierno cubano no tiene responsabilidad en lo que está sucediendo.
Es una “situación coyuntural de desabastecimiento de combustible, no de otras cosas”
El "barco secreto" que debe llegar a Cuba no parece ser otro que el tanquero venezolano "Manuela Sáenz", según confirmó VesselFinder, una web que muestra las posiciones de los barcos en tiempo real y el tráfico marítimo.
Está previsto que el buque venezolano deba arribar al puerto de Cienfuegos, cerca de las 4:00 a.m (hora local).
En abril la administración de Donald Trump sancionó a 34 embarcaciones que trasladaban regularmente petróleo entre Venezuela y Cuba. En ese mismo mes, se extendieron las medidas a otras cuatro compañías y nueve barcos.
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