El periodista independiente Guillermo del Sol se debilita tras 38 días en huelga de hambre

El estado de salud del periodista independiente en huelga de hambre, Guillermo del Sol, se deteriora cada vez más, y su hijo se ha preguntado en Facebook “Hasta cuándo las organizaciones internacionales dejarán que sigan muriendo cristianos por reclamar sus derechos”.

Adrián del Sol Alfonso ha ido publicando en los últimos días varias actualizaciones sobre el empeoramiento de la salud de su padre. “Ya son 37 días de su huelga de hambre en la cual se reclama un derecho que está dentro de la actual Constitución y que el gobierno cubano la viola como viola la carta magna de las Naciones Unidas”, indicó este martes.

Este hombre "no está pidiendo riquezas, está pidiendo los derechos que tienen todos los seres humanos en el mundo y que en Cuba se les viola”, indicó Adrián del Sol Alfonso.

El periodista independiente en huelga de hambre, residente en Santa Clara (Villa Clara), exige a las autoridades que dejen de prohibir la salida de país a los cubanos que son críticos con el régimen, y contra los cuales el Gobierno utiliza el término “regulados”, con el fin de impedirles viajar de forma arbitraria.

“No sé qué planes tiene Raúl Castro conmigo pero yo asumo el reto, y voy a llegar hasta las últimas consecuencias, hasta que no haya más regulados en Cuba, o hasta que deje mi vida en el empeño”, declaró el opositor en una entrevista concedida a Radio y Televisión Martí la pasada semana, en la que aseguró no tener intenciones de abandonar su lucha.

El grupo opositor Corriente Martiana ha solicitado a Naciones Unidas una "acción urgente" ante la delicada situación de salud de Guillermo del Sol.

Desde el 2012 existe en Cuba la figura del “regulado”, una categoría que en principio solo afectaba a altos dirigentes, universitarios vinculados a programas estratégicos, funcionarios relacionados con actividades de primer orden y científico, pero que ahora se utiliza para bloquear la salida de activistas críticos con el Gobierno. La meta del régimen es que no se exponga la realidad de la vida política y civil en la Isla.