El problema de la basura en La Habana es como el cuento de la buena pipa: nunca se acaba. Los desechos continúan inundando las calles durante días, ante la indolencia de las autoridades y el desespero de muchos vecinos afectados.
El reparto Luyanó, en el municipio Diez de Octubre, es uno de esos lugares donde lo mismo la basura doméstica y los escombros predominan en calles, aceras, parque y terrenos baldíos. Espacios públicos que actualmente están convertidos en pequeños vertederos.
El grupo de Facebook "Solo gente de Luyanó" ha denunciado varios de estos basureros. Uno de ellos se ha formado en una de las esquinas del conocido parque Fábrica.
En las imágenes se puede apreciar todo lo que la gente ha tirado: tablas de madera, sacos, cartones de huevos, bolsas de nailon y hasta un viejo tanque de 55 galones.
También se aprecia a varios perros callejeros olfateando sobre las montañas de basura buscando restos de comida.
En otra de las instantáneas predomina una gran concentración de basura en la calle Rodríguez, entre Luco y Villanueva, al lado de un almacén; que denota una prolongada ausencia de los camiones colectores de la Empresa de Servicios Comunales.
Este sábado el gobierno cubano anunció la creación de empresas de Comunales en los 15 municipios “para garantizar la limpieza de la ciudad”, que genera 20.000 metros cúbicos de basura diariamente como promedio.
Las autoridades explicaron que la nueva institución, denominada Empresa Municipal Aurora, funcionará “de manera autónoma” en cada zona. El sistema ya está funcionando en los municipios de Plaza de la Revolución y La Habana Vieja.
Sin embargo la realidad con la que conviven muchos vecinos es triste. El pasado mes de agosto en Santo Suárez, limítrofe con Luyanó, ya se pudieron ver lugares donde los desechos se mezclaban con las aguas albañales. Se trata de una situación capaz de generar un grave peligro epidemiológico, máxime si tenemos en cuenta las lluvias que se registraron en la ciudad por esas fechas.
Este martes un lector que pidió no ser identificado denunció la situación de las calles Lealtad y Concordia, en Centro Habana, donde ha ido creciendo un basurero por más de cuatro semanas, muy cerca de una escuela primaria y de un punto de venta de viandas y cárnicos.
“La gente no soporta las moscas y el mal olor”, reveló el afectado.
También en el barrio Los Pinos, en Arroyo Naranjo, los restos se amontonan por semanas en las inmediaciones de las casas. Recientemente un vecino del lugar denunció que los contenedores de basura pasan hasta dos semanas sin vaciarse y que el agua de lluvia se acumula entre los restos.
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