El activista de UNPACU y promotor de Cuba Decide Ernesto Oliva Torres fue detenido en el día de ayer por la policía de Santiago de Cuba, según denunciaron diferentes personas a través de sus cuentas en las redes sociales.
Para conocer los detalles de lo que sucedió CiberCuba se puso en contacto con el joven opositor, quien nos narró cómo aconteció su detención forzosa.
Según cuenta, estaba jugando ajedrez en las afueras de su casa y aproximadamente a las 5 y 40 de la tarde llegan dos oficiales de la PNR, que se identificaron como Adriel y Fujishiro, y le pidieron que le acompañaran a la estación.
Oliva Torres les preguntó si tenían alguna orden de arresto y el motivo por el cual lo detenían, pero no le dieron ninguna respuesta. En ese momento su teléfono se cae al suelo y se rompe. Fue incautado por los agentes policiales, quienes incluso terminado todo el proceso no se lo devolvieron, se lamenta el opositor.
Posteriormente fue trasladado a la Segunda Unidad, conocida entre los santiagueros como El Palacete, y allí lo metieron en un salón. Oliva Torres siguió preguntándoles por qué razón estaba siendo detenido y una vez más los policías evadieron la respuesta.
Durante su estancia en ese lugar nos cuenta que recibió varias amenazas, fundamentalmente por los videos que suben a internet con las constantes denuncias al Gobierno cubano. Ernesto es parte del equipo de realización que produce estos videos, encargado fundamentalmente de la edición de los mismos. Los policías al frente del interrogatorio le dijeron que él sería responsable de lo que pasara a partir de este momento con esos materiales audiovisuales.
Para Ernesto Oliva la situación más embarazosa fue durante el cacheo, nos cuenta que lo obligaron a estar en una postura bastante “incómoda y humillante”.
“Sin poder tocar la pared con las manos, sino con la cabeza, a una distancia de aproximadamente 70 centímetros y el cuerpo totalmente inclinado hacia adelante”, dice.
Al rato llegó otro oficial. Este se identificó como Lázaro y venía acompañado de otra persona. En esencia le dijeron que las actividades que hacían en las sedes de la UNPACU eran ilegales y que por tanto debían terminar con ellas.
Se refería el oficial no solo a las acciones opositoras propias de la formación política, sino también a las ayudas sociales que brindan a sus miembros y familiares en temas de salud y alimentación. Para ello han destinado recursos, que en las últimas intervenciones la policía política cubana ha decomisado o roto, y ha sido motivo de denuncia por parte de los activistas de UNPACU.
Nos relató que luego de que llenaran una planilla, le advirtieron que esta era la primera advertencia. Que le harían una segunda y si a la tercera no se dejaban de hacer en su casa actividades relacionadas con UNPACU le decomisarían la vivienda que, nos dice, es de su propiedad.
Al irse de la estación El Palacete, Ernesto Oliva se llevó en sus manos dos multas.
Una de las sanciones es de cien pesos, por tener pintado en la pared de su casa un cartel que dice Yo Voto No + Yo No Voto, y la otra de dos mil pesos, supuestamente por no tener licencia para ejercer trabajo por cuenta propia.
Los miembros de UNPACU desde hace unos días han sido atacados, perseguidos y encarcelados por sus actividades opositoras al Gobierno.
Ya no solo se trata de sus principales líderes, como José Daniel Ferrer que lleva más de medio mes encerrado sin razón alguna, sino que se han reportado incidentes vinculados con otros miembros de la formación opositora.
En Las Tunas un campesino fue también multado y detenido por supuestamente comercializar productos agrícolas sin licencia. Sin embargo se trata de un opositor al Gobierno y las autoridades policiales buscaron la manera de establecerle una conexión con alguna causa común y así contribuir al acoso y persecución que viven hoy los opositores cubanos.
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