La Organización Panamericana de la Salud (OPS) sirvió de instrumento del gobierno de Cuba para frenar demandas judiciales interpuestas por médicos cubanos que se desvinculaban de la “misión” en Brasil y pleiteaban su reintegración laboral al programa Más Médicos ante los tribunales del país suramericano, según un documento obtenido por CiberCuba.
En nombre de hacer valer el “convenio internacional” entre Brasil y Cuba, la entidad regional de la salud hizo valer su influencia ante instituciones brasileñas para que se cumpliese la exigencia cubana de poner fin a esas demandas. La OPS intercedió a favor de en la contratación de los cubanos y cobraba una comisión por su gestión.
Entre las acciones emprendidas por la organización estuvo defender ante los poderes brasileños los argumentos de Cuba para mantener a raya a los profesionales de la isla y se respetara el contrato que determinaba, entre otras limitaciones, la confiscación de 70% del salario.
El conflicto comenzó cuando algunas decenas de médicos cubanos descubrieron que podrían usar los tribunales para exigir derechos laborales inalienables a todo trabajador en ese país.
Ante la actitud de la justicia brasileña de acoger las demandas y en algunos casos fallar a favor de los médicos cubanos “desertores”, concediéndoles el derecho a continuar trabajando en el programa sanitario por su cuenta y con el salario integral, Cuba vio amenazado su hegemonía sobre los dividendos del programa y exigió de Brasil medidas que detuviesen la “rebelión” bajo amenaza de interrumpir el suministro de profesionales.
El papel jugado por la entidad regional de la salud queda expuesto en el acta de la IX Reunión Tripartita Brasil-Cuba-OPS, realizada en las oficinas de representación de la institución en La Habana, entre el 9 y 10 de febrero de 2017, a cuyo contenido hemos tenido acceso.
De acuerdo con el documento de 18 páginas, desclasificado por la Cancillería brasileña, ante los reclamos gubernamentales de Cuba para frenar la insubordinación y los argumentos del Ministerio de Salud de Brasil de que no podrían contrariar decisiones de la justicia, la OPS puso a disposición de las partes su equipo legal.
Según el acta de la reunión, correspondió a la OPS “elaborar respuesta oficial a la Abogacía General de la Unión (AGU) de Brasil, a través del Ministerio de Relaciones Exteriores con copia al Ministerio de Salud de Brasil, sobre las acciones presentadas por los médicos cooperantes, discutidas en esta reunión tripartita”.
La OPS estuvo representada en la reunión en La Habana por Heidi Jiménez, principal asesora jurídica de la entidad y directamente vinculada a la oficina de la Directora Regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud, la doctora Clarissa Etienne.
Asimismo, presidía la reunión, el doctor Joaquín Molina, exfuncionario del Ministerio de Salud Pública (MINSAP), quien en los años de permanencia del contingente cubano en Brasil ejercía como representante de la OPS en el país suramericano.
Los argumentos oficiales
De acuerdo con el acta del encuentro, tras la introducción protocolar hecha por el doctor Molina, la discusión se enfocó en los pleitos presentados por excolaboradores cubanos: 35 hasta ese momento, 12 de ellos con decisiones favorables a los médicos, 12 pendientes de veredicto y 11 negados, según explicó a los asistentes Janaina Pontes Cerqueira, asesora jurídica del Ministerio de Salud brasileño.
Enseguida tocó el turno de la viceministra de salud de Cuba, Marcia Cobas Ruiz, para apuntar la gravedad del asunto y la necesidad de que el gobierno brasileño garantizara el cumplimiento de los acuerdos bilaterales y prohibiera la contratación directa de médicos cubanos en Brasil, por fuera del programa establecido.
La viceministra aseguró ser la primera vez “que surgía esta problemática en los más de 50 años de la cooperación médica en el exterior”, reseña el documento.
Para la representante del MINSAP, los tribunales brasileños no tenían jurisdicción para resolver las demandas, dado que los médicos cubanos “están amparados por las leyes laborales y administrativas de Cuba”. “Las demandas presentadas por los médicos cubanos en Brasil no son legítimas y pueden provocar el desmantelamiento del Programa”, llegó a amenazar la viceministra.
Además de afirmar que cualquier determinación judicial en ese sentido no sería acatada, por considerarse una violación de la soberanía nacional, Cobas pidió a las autoridades brasileñas una acción legal de “alto impacto”.
En este punto de la reunión intervino la representación panamericana. “La doctora Heidi Jiménez, de OPS/Washington, informó sobre la responsabilidad de OPS ante todos los estados miembros y sus soberanías. La OPS ha trabajado en conjunto con Cuba y Brasil para la continuidad de los convenios y en la defensa del Programa. Señaló que la organización está dispuesta a conversar con todos los actores involucrados y buscar alternativas”, apunta el documento.
Brasil dispuesto a cooperar
El representante del Ministerio de Salud de Brasil, doctor Wellington Mendes, expresó apoyo al pedido cubano, pero recordó que en Brasil los poderes ejecutivo, legislativo y judicial eran independientes, y que el ministerio tendría que acatar cualquier decisión de los tribunales, por lo que solicitó la intervención de la OPS ante el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil para hacer cumplir las obligaciones internacionales del país.
La doctora Jiménez asumió entonces el compromiso, en nombre de la OPS, de elaborar un documento que sería llevado a la cancillería brasileña.
El broche lo puso el más alto representante de la delegación brasileña, el Secretario de Gestión del Trabajo y Educación en Salud, Rogerio Luiz Zeriak Abdalla, departamento responsable por el Más Médicos. Abdalla determinó que los nuevos casos de demandas de médicos cubanos serían desvinculados de sus actividades en los municipios y puestos a disposición de la OPS en Brasil.
Esto significaba, puestos en manos de la oficina dirigida entonces por un médico cubano y donde operaban bajo el manto de consultores internacionales de OPS al menos 27 funcionarios del MINSAP, encargados de controlar las actividades del contingente cubano, que integraban unos 9.500 galenos.
Entre 2013 y 2018, la OPS contrató a 120 de estos consultores, que fungían para Cuba como “coordinadores de misión”, de acuerdo con los Planes de Trabajo que la organización publica desde 2014 y con un informe del Tribunal de Cuentas de Brasil (TCU), que analizó los desembolsos del gobierno federal para la OPS en el marco del Más Médicos.
Con sede en Washington DC, la OPS representa a 52 países del área y funciona como oficina regional para las Américas de la Organización Mundial de la Salud (OMS). El organismo panamericano se quedaba con el 5% de todos los recursos transferidos por Brasil para el mantenimiento del programa Más Médicos.
Recientemente cuatro médicos cubanos que trabajaron en Brasil plantearon una demanda en Miami contra la OPS, bajo el argumento de haber facilitado la "red de tráfico humano" y "esclavitud" que había detrás del programa Mais Médicos en Brasil, según sostienen.
En su demanda, los doctores Ramona Matos, Tatiana Carballo, Fidel Cruz y Russela Rivero, aseguran que la OPS recaudó más de 75 millones de dólares a través del programa Mais Médicos. Ramona Matos fue el primer profesional cubano que desertó en Brasil, a principios de 2014, e hizo público el contrato que regía la relación laborar entre los galenos y la Comercializadora de Servicios Médicos Cubanos, S.A.
El papel oficialista de la OPS
Según el Acta de la reunión tripartita, de los 16 acuerdos que salieron de las discusiones en La Habana, 11 tendrían participación directa de la OPS, entre ellos:
- Entregar al Ministerio de Salud de Brasil, dos meses antes de cumplir el fin de misión, la relación de colaboradores formalizados en matrimonio con ciudadano brasileño, que renovarán el contrato por tres años más en el programa. Responsable: Embajada de Cuba/OPS Brasil. (El contrato del Más Médicos establecía la permanencia en Brasil por tres años, a excepción de los profesionales casados con brasileños a quienes se les permitió renovar por tres años más, siempre que volvieran a Cuba al final del contrato para efectuar la renovación. La jefa de la Brigada Médica Cubana en Brasil, Dra. Cristina Luna, informó a la reunión que había en ese momento 883 médicos casados).
- Garantizar que la solicitud de reubicación de los médicos formalizados en matrimonio o con relación de familiaridad se haga de manera oficial al Ministerio de Salud de Brasil (MINSA)y no de manera directa del colaborador, teniendo en cuenta los parámetros que se han establecido. Responsable: Embajada de Cuba/OPS Brasil. Garantizar el cumplimiento del plan de reposición mensual, ante las bajas no planificadas, asegurando la permanencia en el programa, como mínimo, de los 9.500 médicos acordados. Responsable: MINSAP/OPS/MINSA.
- De conjunto con las partes y Cubana de Aviación, realizar hasta el 30 de abril la planificación tentativa del plan de vuelo de 2018. Responsable: MINSA/MINSAP/OPS.
- Las partes se comprometen a buscar todas las soluciones posibles para evitar que los médicos sean ubicados solos en los municipios. Responsable: Representantes de estados y municipios brasileños invitados a la reunión/OPS/MINSA.
*En foto de portada: De izquierda a derecha, en la mesa, Joaquín Molina, representante de la OPS/OMS en Brasil; Rogério Luiz Zeraik Abdalla, Secretario de Gestión del Trabajo y de Educación en Salud de Brasil; Marcia Cobas, viceministra de Salud Pública de Cuba; Heidi Jiménez, Directora del Departamento Legal de la sede de la OPS/OMS en Washington e Ileana Fleitas, representante de la OPS en Cuba, durante una reunión en La Habana en 2017.
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