Vídeos relacionados:
En el año 1938 Bienvenido Julián Gutiérrez (La Habana 1900-1966) escribió una canción imperecedera, de solo dos estrofas. Sus versos son sencillos pero contundentes. Están dedicados a una mujer y contienen las claves del más antiguo dolor del alma, el desengaño amoroso.
Convergencia es un bolero universal
Lo más leído hoy:
Bienvenido Julián fue de esos genios que nunca cursó estudios de música. Se dice que ni siquiera tenía buena voz. Pero el destino es curioso, ese hombre sencillo, legó a la cultura cubana alrededor de 500 canciones y muchas de ellas memorables.
La mayoría de sus composiciones fueron sones y guarachas. Está por ejemplo “El huerfanito”, “Sensemayá”, “Los tres Juanes” muy conocida por estar dedicada a la Virgen de la Caridad o “El diablo tun tún” que hoy da nombre a una Casa de la Música en Cuba.
La más universal de sus canciones es sin dudas Convergencia, un bolero que está considerado entre las diez mejores obras de la música popular cubana.
Marcelino Guerra musicalizó los versos
Cuenta la leyenda que Bienvenido, loco y soñador como de costumbre, tomó un día sus versos y fue a buscarles música. Marcelino “Rapindey” Guerra, sonero grande donde los hay, fue el único que se atrevió a tanto. En julio de 1939 se cantó por primera vez Convergencia.
Lo grabó el Cuarteto Caney de Machito Grillo en Nueva York. El puertorriqueño Johnny López puso su voz. Fue una pieza perfecta, pero sin la bomba emocional de los intérpretes cubanos. Esa pasión tardó veinte años en manifestarse y ocurrió en la voz de Miguelito Cuní, en 1958.
Convergencia comenzó a ganar fama mundial en la década de 1980, época de expansión de la música popular cubana. Otras interpretaciones que catapultaron este bolero fueron la de Miguelito Cuní junto a Pablo Milanés y posteriormente la de Ibrahim Ferrer.
Principio y fin de la ilusión, así eres tú en mi corazón…
En Convergencia no hay dolores ni quebrantos, sino un simple análisis racional de lo que somos cada uno de nosotros cuando entramos en una línea de vida en la que dos almas convergen para amar, pero solo una sobrevive feliz a ese amor.
No existe ninguna foto de Bienvenido ni grabaciones de su voz. Muchos investigadores de la música cubana aún cuentan su historia porque los amantes del bolero se niegan a que perezca en el olvido y porque en la vida siempre tenemos alguna convergencia.
Convergencia
Aurora de rosa en amanecer,
nota melosa que gimió el violín.
Novelesco insomnio do vivió el amor,
así eres tú mujer:
Principio y fin de la ilusión,
así eres tú en mi corazón,
así vas tú de inspiración.
Madero de nave que naufragó,
piedra rodando, sobre sí misma,
alma doliente vagando a solas
de playas, olas, así soy yo:
La línea recta que convergió
porqué la tuya final vivió.
Archivado en: