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El camión de UPS que fue secuestrado y se vio involucrado en el tiroteo tras el asalto a una joyería de Miami, quedó completamente agujereado y cubierto de sangre.
Como lo muestran las imágenes compartidas en redes sociales por el periodista Mario Vallejo, los tiros atravesaron el vehículo, y en la puerta se ven manchas de sangre presuntamente de la víctima, el conductor Frank Ordóñez.
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Ordóñez se encontraba en su primer día de trabajo como conductor de UPS. Cuando acababa de completar su entrenamiento, resultó ser una de las cuatro víctimas mortales de la persecución y tiroteo que tuvo lugar el jueves último en Miami.
El joven, que vivía en Hialeah Gardens, llevaba cinco años en UPS y el camión que conducía fue secuestrado tras el robo a la joyería Regent en Coral Gables. Además de él, fallecieron un hombre presente en el lugar donde se produjo el tiroteo y los dos asaltantes, quienes dispararon contra la policía.
El incidente comenzó en Miracle Mile, Coral Gables, y terminó en Miramar Parkway, a unas 30 millas de distancia. Luego de recorrer la autopista I-75 a alta velocidad y con decenas de policías detrás, el camión se abrió paso a través de Pembroke Pines y Miramar. Varios conductores que manejaban por el área confirmaron que debieron apartarse como pudieron de la vía.
Ahora la familia de Frank Ordóñez responsabiliza a la Policía de su muerte por no aplicar correctamente el protocolo establecido en casos de rehenes.
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