Llegó el día en que las reglas del juego vuelven a cambiar otra vez: este 10 de diciembre entran en vigor las nuevas medidas de la Administración Trump referentes a los viajes a Cuba. A partir de hoy, los vuelos charters regresan a ser la vía fundamental de viajes a la isla, exceptuando a la capital.
Anunciadas el pasado 25 de octubre, las regulaciones causaron amplio revuelo en la comunidad cubana en Estados Unidos, toda vez que limitaban drásticamente el número de vuelos y los accesos a estos.
A partir de hoy 10 de diciembre ninguna aerolínea estadounidense (y algunas no estadounidenses pero con negocios en Estados Unidos), estará aterrizando en aeropuertos cubanos como no sea el José Martí de La Habana.
"A petición del Secretario de Estado, el Departamento de Transporte de Estados Unidos (DOT) suspendió hasta nuevo aviso el servicio aéreo regular entre Estados Unidos y los aeropuertos internacionales cubanos, exceptuando el Aeropuerto Internacional José Martí de La Habana, para impedir que el régimen cubano se beneficie de los viajes aéreos", indicó el Departamento de Estado en un comunicado oficial el pasado 25 de octubre.
Los vuelos fletados (charters) a Cuba no se vieron afectados en esta restricción, y por el momento podrán continuar sus itinerarios y reservaciones de boletos como venían realizando hasta el momento. Sin embargo, dos fuentes muy vinculadas a Washington dijeron a CiberCuba el pasado 30 de octubre que también hay sobre la mesa restricciones para estos, aunque no se hayan anunciado aún.
Si usted compró boletos para volar a Cuba antes del anuncio de estas restricciones, las aerolíneas todavía hoy están reembolsando el monto de esos pasajes, aunque con algunas irregularidades.
A partir de hoy, estos son todos los aeropuertos cubanos a los que no podrás viajar con vuelos directos: Aeropuerto Internacional Ignacio Agramonte, en Camagüey; los aeropuertos de Cayo Coco y Cayo Largo; el aeropuerto Jaime González, en Cienfuegos; el aeropuerto Frank País, en Holguín; el aeropuerto de Manzanillo; el aeropuerto Juan Gualberto Gómez, en Matanzas; el aeropuerto Abel Santamaría, en Santa Clara; y el aeropuerto Antonio Maceo, en Santiago de Cuba.
Los charters ocupaban hasta el momento de anunciarse estas medidas el 32 por ciento del mercado de viajes a la isla, con un promedio de 69 vuelos semanales, de acuerdo con cifras de The Havana Consulting Group. Se espera que ante el incremento de la demanda, estas cifras aumenten.
Las aerolíneas estadounidenses tuvieron 45 días para descontinuar todos los servicios aéreos regulares entre Estados Unidos y los destinos aeroportuarios del interior de la isla, revirtiendo todo el restablecimiento de los vuelos comerciales a Cuba que promovió la administración de Barack Obama en 2016.
¿Qué opinas?
COMENTARArchivado en: