La astronauta estadounidense Christina Koch hizo historia este sábado al batir el récord de permanencia de una mujer en el espacio, con 289 días consecutivos, en una misión de la NASA que se espera dure aproximadamente 11 meses.
La ingeniera eléctrica de 40 años, nacida en Montana, salió de la Tierra el 14 de marzo rumbo a la Estación Espacial Internacional (EEI), donde en octubre también protagonizó, junto a su compañera Jessica Meir, la primera caminata espacial femenina.
El récord de 288 días lo estableció la excomandante estadounidense Peggy Whitson en 2015, y si Koch logra permanecer los 328 días que dura su misión, impondría una marca bastante difícil de igualar.
La astronauta fue enviada a la EEI para estudiar los efectos de los vuelos espaciales largos, datos que permitirán a la NASA apoyar futuras misiones de exploración a la Luna y Marte.
Su regreso a la Tierra se producirá solo 12 días antes que la permanencia espacial más larga de un astronauta de la NASA, establecida entre 2015 y 2016 por el estadounidense Scott Kelly.
Al récord mundial, implantado en 1995 por el ruso Valeri Poliakov, no se ha acercado nadie. El cosmonauta estuvo 438 días consecutivos a bordo de la estación espacial rusa Mir.
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