Alberto Rodríguez Bravo, el padre del pequeño de dos años que llegó a Miami para ser operado de un tumor cerebral, declaró que la situación que vive toda la familia, a pesar de los apoyos, no deja de ser difícil.
"Más dura y difícil no puede ser", declaró Rodríguez a CiberCuba a través de una llamada telefónica, tras mencionar que al estar en la isla, lejos del pequeño Thiago, durante todo el proceso de la cirugía y la posterior rehabilitación es inexplicable lo que se siente.
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Agradece también a aquellos que sin conocerlos han ayudado en las donaciones económicas y los mensajes de solidaridad enviados durante todos estos días.
La conversación tuvo lugar horas antes de que sometieran al pequeño Thiago a la segunda intervención quirúrgica este lunes, para extirparle el 40 por ciento del tumor cerebral que padece.
"Los doctores tienen mucha esperanza", declaró el padre a este medio.
La familia, a ambos lados del estrecho de la Florida, también ha sido importante para que ambos padres no se sientan solos. A pesar de ser jóvenes, la situación saben llevarla por la fuerza que les transmiten "Estamos todos muy unidos", cuenta.
Para financiar los gastos de las operaciones y rehabilitación en Estados Unidos la familia lanzó una campaña de recaudación de fondos, que le permitirá al pequeño recibir una atención de máxima calidad.
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