Una tragedia americana: Juez federal se niega a liberar a presos en cárcel con 400 enfermos de coronavirus

La cárcel del condado de Cook, en Chicago, se ha convertido en el foco de contagio más grande del país, pero el alguacil afirma que sus números son más altos porque se están haciendo más pruebas.

Cárcel del condado de Cook, Chicago © FOX Screenshot
Cárcel del condado de Cook, Chicago Foto © FOX Screenshot

Vídeos relacionados:

Este artículo es de hace 4 años

Un juez federal negó este jueves la solicitud de una liberación masiva de presos en una cárcel del suroeste de Chicago debido a preocupaciones por el coronavirus, pero ordenó al alguacil Thomas J. Dart que implementara nuevas medidas de seguridad para detener la propagación de la COVID-19 en el recinto.

La cárcel se ha convertido en el foco de contagio más grande del país, pero Dart afirma que sus números son más altos porque se están haciendo más pruebas. Según datos recopilados por The New York Times, la cárcel del condado de Cook tiene la mayor cantidad de enfermos fuera de las instalaciones hospitalarias, superando en casos positivos a un hogar de ancianos en Kirkland, Washington o el brote de New Rochelle, en el estado de Nueva York.


Lo más leído hoy:


Según las cifras divulgadas este jueves, hay 276 detenidos de la cárcel de Cook que han dado positivo por coronavirus. De ellos 219 estaban siendo tratados y monitoreados por los Servicios de Salud Cermak de la cárcel.

Los números también incluyen 150 miembros del personal del sheriff COVID positivo, algunos de los cuales no trabajan dentro de las instalaciones de la cárcel.

Dos reclusos de la cárcel han muertos después de dar positivo por el coronavirus.

El primer interno en morir por COVID-19 fue Jeffrey Pendleton, de 59 años, fallecido en el Hospital Stroger del Condado de Cook el pasado domingo. El segundo interno, Leslie Pieroni, de 51 años, fue declarado muerto el jueves por la noche en el Hospital St. Anthony, según la oficina del sheriff del Condado.

Había estado hospitalizado desde el viernes de la semana pasada después de dar positivo por COVID-19. La causa oficial de la muerte está pendiente de una autopsia, pero se cree que murió por complicaciones del virus.

Pieroni fue encarcelado el 23 de diciembre de 2018, luego de que se le ordenó su detención sin fianza por un incidente el mes anterior cuando presuntamente abusó sexualmente de un menor de 13 años.

Hay al menos 1.324 casos confirmados de coronavirus y unas 32 muertes vinculadas a prisiones y cárceles en todo Estados Unidos, según datos rastreados por el diario The New York Times.

"Este ha sido un momento difícil para todos", dijo Thomas J. Dart, el sheriff del condado, que decidió mantenerse alejado de su esposa e hijos porque teme transmitirles el virus.

Dart ha establecido un área de cuarentena para los reclusos que dieron positivo y otra para monitorear a aquellos que muestran síntomas. Los casos más graves, unos 17 el miércoles, han sido ingresados ​​en hospitales.

El brote de la cárcel al suroeste de Chicago parece confirmar los temores de muchos funcionarios de salud, quienes advirtieron que las prisiones y cárceles superpobladas e insalubres de Estados Unidos probablemente serían una fuente importante de propagación del virus.

La preocupación por la propagación de la epidemia ha llevado a las autoridades de todo el país a liberar a miles de presos, muchos de los cuales estaban en espera de juicio o cumplían condena por delitos no violentos. Pero esas medidas no han evitado un vertiginoso ritmo de infección entre una población carcelaria en la que el distanciamiento social es prácticamente imposible y el acceso al agua y al jabón no está garantizado.

La rápida transmisión ha dejado las cárceles en todo el país en un estado de miedo, tensión y desconfianza. Algunas instalaciones han colocado a reclusos con fiebre en confinamiento solitario, mientras que otras cárceles federales y ciertas instalaciones estatales han mantenido a los prisioneros encerrados dentro de sus celdas durante más de 22 horas al día para restringir el movimiento y la posible transmisión. Otras envían a los prisioneros que dan positivo a microprisiones establecidas rápidamente.

Pero la mayor preocupación podría estar en las instalaciones, donde se ha hecho poco para detener la propagación del virus.

Las muertes por coronavirus en Estados Unidos sobrepasaron las 16.600 este jueves, aunque hay señales de que la pandemia estaría cerca de su pico en la curva de contagio.

COMENTAR

Archivado en:

Ernesto Hernández Busto

Periodista y ensayista cubano. Fundador del sitio Penúltimos Días.


¿Tienes algo que reportar?
Escribe a CiberCuba:

editores@cibercuba.com

+1 786 3965 689


Siguiente artículo:

No hay más noticias que mostrar, visitar Portada