La familia Sirk asumirá "todo el coste de los servicios médicos de Cuba para atender enfermos de coronavirus en Andorra", informó el portavoz del gobierno del Principado, Eric Jover, que no reveló el importe del convenio firmado entre ambos gobiernos.
La familia "se ha ofrecido a hacer esta donación y que se lo agradecemos mucho, ya que se harán cargo de todo el coste del convenio por el que hemos traído a los sanitarios cubanos", dijo el ministro vocero del gobierno andorrano, según los reportes de medios de comunicación andorranos.
CiberCuba está intentando obtener una reacción del gobierno cubano, pero hasta ahora no ha sido posible hablar con la viceministra de Salud Pública para la Colaboración, las Relaciones Internacionales y la Información, Marcia Cobas Ruiz, a la que también preguntaremos por la reciente decisión norteamericana de entorpecer ventas de material sanitario a la isla, como ha denunciado su gobierno.
Ninguna de nuestras llamadas este domingo al Puesto de Mando del MINSAP ha sido respondida en los teléfonos que aparecen en la web ministerial: 7 8353996, 7 8353995, 7 8309043, ni en la pizarra telefónica con el número 7 8383880.
La pequeña nación europea ha creado un fondo de solidaridad, para afrontar la epidemia de COVID-19, con aportes financieros de empresas, ciudadanos anónimos y las fortunas familiares más notables de Andorra que -hasta ahora- han aportado casi un millón 700 mil euros, según cifras oficiales.
Andorra y Cuba firmaron un contrato que posibilitó la llegada de 39 sanitarios cubanos al principado europeo, donde trabajan en el hospital Nostra Señora de Meritxell y en el Centro sociosanitario El Cedro para reforzar el personal del estatal Servicio Andorrano de Asistencia Sanitaria.
En días recientes, saltó la alarma porque uno de los médicos cubanos desplazados a Andorra dio positivo a un test de COVID-19, lo que provocó el aislamiento de la brigada y el cese temporal de sus actividades, pero la segunda prueba resultó negativa y el supuesto contagiado y sus compañeros se reintegraron al trabajo, tras haber pasado una cuarentena.
Los medios de comunicación del gobierno cubano silenciaron el posible positivo y amplificaron la vuelta al trabajo del médico sano y sus compañeros, decisión que provocó más de una broma en los pasillos del Ministerio de Salud Pública, donde varios trabajadores comentaron "ah, pero teníamos un compañero enfermo en Andorra", contó una empleada.
El gobierno cubano no revela el contenido de sus contratos de venta de servicios médicos a precios de mercado y se limita a comunicar a la opinión pública nacional e internacional, que son gestos de "solidaridad" y demostración de la "potencia médica" que asegura ser.
Una fuente del Ministerio de Economía y Planificación (MEP) reveló a CiberCuba que los contratos firmados con gobiernos extranjeros para desplazar médicos a países afectados por la pandemia de coronavirus incluyen una fórmula de pago mixto, una parte en dinero y la otra en equipamiento médico y medios de protección.
Archivo Cuba ha documentado el carácter de "trabajo esclavo" de los médicos cubanos enviados por el gobierno castrista al extranjero, incluida la apropiación de un 75% de sus salarios.
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