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Después de que el refrigerador de su casa dejase de funcionar por problemas con la congelación, ahora el actor cubano Luis Silva ha tenido que lidiar con otro inesperado problema en casa en medio de la cuarentena que él y su familia se encuentran cumpliendo con motivo al coronavirus en Cuba.
El artista compartió un vídeo en su perfil de Facebook tomado desde la azotea de su residencia en el que contó a sus seguidores que se le ha roto el motor del agua, pero que momentos después de echarlo a andar cogió aire y tuvieron que volver a arreglarlo.
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"Yo aquí, entretenido, el motor del agua ahora se rompió. Lo que me ha caído es todo en la cuarentena", "el refrigerador ya echó a andar, por suerte revivió. El motor ahora tuvo un bateíto, ya la arreglemos, entonces cogió aire, tuvimos que sacarle el aire. Ya tu sabes, las cosas de la cuarentena", dijo.
Además de comunicar las últimas incidencias de su hogar, Silva quiso agradecer a todas aquellas personas que se han comunicado con él para preocuparse por su estado de salud y por el de todo el equipo de la serie humorística Vivir del cuento. Asimismo, aprovechó para aclarar que los episodios que se están emitiendo en la pequeña pantalla fueron filmados antes de que se desatara la alarma en la isla por el COVID - 19, de ahí la ausencia de mascarillas.
"Agradecer a todas las personas que me escriben, a toda la gente que está siguiendo Vivir del cuento. Las que están preocupadas porque estamos grabando sin nasobuco, estos capítulos que están saliendo los grabamos hace un mes. Siquiera había casos de coronavirus aquí en Cuba, estaba empezando, y por su puesto, por eso no utilizamos ningún nasobuco", expresó.
Sobre cómo están llevando la continuación del programa en estos tiempos de coronavirus, el actor comentó que no podrán seguir "hasta nuevo aviso", pero tranquilizó a su seguidores diciendo que había "Vivir del cuento para rato" y que ya verán qué inventan para seguir entreteniendo al público.
"Nos quedan lamentablemente dos lunes con capítulos, se nos acaban los capítulos, llevamos más de un mes sin grabar", "se nos acaba la materia prima, hasta nuevo aviso, ya veremos qué inventamos, qué solución le damos a esa historia, vamos a ver", dijo.
De igual modo, señaló que de estar el coronavirus hubiese sido bastante difícil incluir el uso de mascarillas en sus personajes, pues ellos intentan tocar temas de la actualidad, pero mezcladas con la ficción.
"Agradezco a todas las personas que se han preocupado porque estamos grabando sin nasobuco. Pero recuerden que Vivir del cuento es un programa que, aunque toca la realidad cubana, es un programa de ficción. Las cosas que ocurren son de la imaginación de los escritores y de nosotros mismos, y todo no lo podemos hacer a la par de la realidad porque sino Pánfilo estaría solo en su casa en total aislamiento y ningún vecino podría ir a su casa. De alguna manera manera tenemos que jugar con la ficción y la realidad", agregó.
Asimismo, añadió que tanto los actores como todo el equipo técnico de la serie se encuentran en sus hogares pasando la cuarentena para evitar así el riesgo de contagio.
"Nosotros nos estamos cuidando, hace más de un mes lo actores estamos trancados en casa, no estamos grabando. Los estudios de Vivir del cuento están cerrados, la casa de Pánfilo lleva más de un mes cerrada", concluyó.
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