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Los casos de coronavirus diagnosticados en el mundo superaron este lunes los 8 millones. La epidemia que se inició a fines de 2019 en Wuhan, China, hoy se extiende por 185 naciones.
Aunque algunos países comienzan a reactivar sus economías y reabrirse a la actividad comercial y la interacción social, los casos de la COVID-19 continúan en ascenso en diferentes ciudades del mundo, en particular en Estados Unidos y Brasil.
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Alrededor del 25% de los nuevos casos diagnosticados positivos por coronavirus en el mundo se encuentran en los Estados Unidos, país que registra 2 114 026 personas infectadas con este virus y 116 127 defunciones por esta causa.
Sin embargo, el brote más rápido se ha dado en América Latina, en especial en México (150 264), Chile (179 436) Perú (232. 992) y en Brasil, país que actualmente reporta 888 271 casos diagnosticados.
Aunque han pasado algunas semanas, los brasileños ahora recuerdan más que nunca aquellas declaraciones de su presidente Jair Bolsonaro, cuando se refirió al coronavirus como “una gripecita” que hoy deja más de 43 959 muertes en su territorio.
En el tercer lugar de los países más afectados en el mundo se encuentra Rusia, donde se diagnostican hasta la actualidad 544 725 casos, aunque con un índice de letalidad menor que el de otras naciones en las que se reportan muchos contagios.
El continente africano también está siendo golpeado duramente por la epidemia. Muchas Organizaciones No Gubernamentales que trabajan en la región aseguran que no existen diagnósticos de la enfermedad por la escasez de recursos sanitarios y la pobreza de estos territorios.
Uno de los casos más recientes que ha tenido a la COVID-19 como trasfondo en África, ha sido la muerte del presidente de Burundi, Pierre Nkurunziza, oficialmente informada como defunción por un infarto, el pasado 10 de junio.
Sin embargo, el diario belga Le Soir anunció que el coronavirus pudo ser la causa real del deceso de Nkurunziza. Si se confirma que fue víctima de la COVID-19, sería el primer presidente que muere por la pandemia.
Paradójicamente su condición de religioso evangelista le hacía creer al presidente que Burundi estaba protegido por Dios y no sufriría los efectos de esta enfermedad.
Por su parte en China, después de casi dos meses sin nuevas infecciones, autoridades de Pekín informaron 79 casos en los últimos cuatro días. Esto obligó a poner puestos de control de seguridad, cerrar escuelas y ordenar pruebas de detección del coronavirus este lunes.
El inesperado aumento de casos de coronavirus está relacionado con un enorme mercado de alimentos al por mayor en la capital. Este hecho revivió los temores sufridos al inicio de esta pandemia que todavía tiene paralizado a medio mundo.
En Cuba, el sistema de salud pública mantiene un reporte sistemático de la situación epidemiológica en esta crisis sanitaria que ha dejado importantes efectos en la débil economía.
El cierre de las fronteras supuso el fin de la actividad turística. Sin embargo, el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) reactivó contratos en su sector, con diferentes estados de Latinoamérica, el Caribe y Europa, lo que supone el ingreso de grandes cantidades de dinero para el Gobierno cubano por concepto de colaboración internacional.
Los profesionales de la salud cubanos continúan trabajando por erradicar el virus en la isla. Este martes el sistema de salud confirmó 11 nuevos casos positivos por coronavirus, lo que eleva el total a 2273.
Por quinto día consecutivo no se reportaron nuevas muertes por COVID-19 en Cuba, donde el índice de letalidad es de 3.76%, uno de los más bajos en la región de las Américas, por lo que la isla ocupa la posición 18 en el área.
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