Un policía de Cocoa Beach, Florida, tiró de la mano de un niño alejándolo rápidamente de un tiburón que nadaba hacia él, un incidente que quedó grabado en cámaras y con numerosas reacciones en redes sociales.
En las imágenes se aprecia que el pequeño se encuentra a pocos metros de la orilla cuando el pez avanza hacia él. “¡Hey, amigo! Oye, hay un tiburón allí”, dice un bañista, antes de que otro grite: “¡Ahí está!”.
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Entonces el oficial Adrian Kosicki haló al pequeño logrando sacarlo del agua antes de un posible encuentro peligroso.
Kosicki estaba fuera de servicio el pasado jueves 16 de julio, en que ocurrieron los hechos. Caminaba por el borde de la playa junto a su esposa, cuando advirtió que el escualo se hallaba cerca del menor. Rápidamente entró al agua y sacó al niño de ella.
Numerosos usuarios elogiaron la actitud del oficial y agradecieron el modo en que cumplió con su deber, en momentos en que el trabajo de la policía es cuestionado en el contexto de las protestas raciales y el movimiento Black Lives Matter.
“Da miedo lo cerca que llegó de la orilla. Pero sí, hay un 99% de posibilidades de que no hubiera hecho nada, es por eso que a propósito se acercó tanto”, comentó un usuario al video compartido en Facebook.
La especie de tiburón no fue precisada en la publicación, aunque algunos internautas opinaron que podía tratarse de un espécimen peligroso.
“Ciertamente no somos biólogos marinos, educados y entrenados para diferenciar entre las diversas especies de tiburones, sus respectivos hábitos de alimentación y agresividad cerca de los nadadores”, aclaró la policía local. “Simplemente hacemos lo que hacemos mejor: proteger al público del daño”.
La mayor cantidad de ataques de tiburones en Florida se reportan durante los meses de julio, agosto, septiembre y octubre, un periodo en que aumenta la temperatura del agua y la actividad humana en las aguas, si bien este año no ha tenido la concentración de personas que en etapas anteriores, debido a las regulaciones por la pandemia de coronavirus.
El condado de Brevard, donde se encuentra Cocoa Beach, tiene el segundo mayor número de ataques de tiburones de Florida detrás del condado de Volusia, de acuerdo con el Brevard Times. En Volusia están las ciudades de Daytona Beach y New Smyrna Beach, que es conocida como la capital mundial de la mordedura de tiburón por la alta incidencia de estos encuentros.
Precisamente en New Smyrna Beach un surfista captó en febrero pasado con un drone un enorme grupo de tiburones nadando en las aguas de la playa.
“Estaba asombrado. Solo he visto imágenes como esa en la Semana del Tiburón y siempre he soñado con obtener un clip como este, especialmente porque somos la capital mundial de las mordeduras de tiburones”, dijo Jeremy Johnston, de 33 años.
Históricamente, los dos condados mencionados representan casi la mitad de todos los ataques de tiburones en Florida cada año.
Los investigadores sostienen que la mayor cantidad de mordeduras de escualos en las aguas de Florida más cercanas a Disney World y Universal Studios en Orlando es atribuible al alto uso recreativo acuático de los residentes y turistas del estado, incluido un gran número de surfistas, y a la rica naturaleza de su fauna marina.
El estudio anual del Registro Internacional de Ataques de Tiburones (ISAF, por sus siglas en inglés) concluyó que Florida era el lugar del mundo donde más ataques no provocados de tiburones ocurrieron en 2019. Según ISAF, estos ataques son “incidentes en los que se produce un ataque contra un humano en el hábitat natural del tiburón sin provocación”.
En mayo, Telemundo 51 grabó la imagen de un enorme tiburón en una playa de Miami que acechó a dos bañistas en kayak, bien cerca de la orilla. La organización Ocearch detectó en diciembre de 2019 la presencia de un tiburón blanco de 12 pies y unas 998 libras en Biscayne Bay, también en Miami.
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