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La Corte Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió al gobierno de Panamá ayuda para los migrantes que están varados en ese país en medio de la crisis mundial asociada al nuevo coronavirus, una petición que podrá beneficiar a los cubanos que se encuentran en esa nación con el fin de pedir asilo en Estados Unidos.
"Las dificultades del contexto actual requieren sinergia y solidaridad entre los Estados, las organizaciones internacionales y la sociedad civil para brindar una respuesta regional y global efectiva a los desafíos derivados de la pandemia que enfrentan las personas en movilidad humana", señaló la CIDH en una resolución divulgada la noche del viernes.
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Los migrantes, fundamentalmente africanos, asiáticos, cubanos y haitianos, se encuentran concentrados en los campamentos de La Peñita y Lajas Blancas, en la zona selvática del Darién. No tienen posibilidades de salir de Panamá por el cierre de fronteras a causa de la pandemia del CCOVID-19, explican
Por decisión del tribunal, con dese en Costa Rica, el secretario general de la OEA recibirá una copia de la resolución para que "coadyuve a impulsar los diálogos correspondientes y a promover soluciones regionales a esta situación".
La resolución de la CIDH instó al gobierno panameño para que tome "medidas adicionales y adecuadas de prevención del contagio del COVID-19 y proveer de forma suficiente la atención médica requerida" y precisó una serie de requerimientos mínimos, "de acuerdo a las recomendaciones actuales disponibles, para la implementación de las medidas necesarias para garantizar los derechos humanos de las personas que se encuentran en situación de movilidad en el contexto de la pandemia".
Por último, exigen a las autoridades de ese país centroamericano presentar, a más tardar el 1 de septiembre de 2020, un informe completo y detallado sobre el cumplimiento de lo dispuesto en esta resolución.
En medio de la actual crisis sanitaria internacional, el gobierno de Panamá aisló a casi 200 migrantes, entre ellos algunos cubanos, en un campamento en la selva para contener un nuevo brote de coronavirus en la región del Darién. Según trascendió, los migrantes, que se encuentran en el campamento Lajas Blancas, no pueden salir de las instalaciones sin permiso, aunque pueden comprar suministros en tiendas cercanas.
A principios de julio, un grupo de cubanas fue rescatada de una organización criminal dedicada a la trata de personas. Además se identificaron víctimas procedentes de Nicaragua, Colombia, Costa Rica y Venezuela.
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