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La niña de tres años Lys de la Caridad Cotilla Ruiz necesita una visa humanitaria de Estados Unidos para que pueda ser tratada en ese país por una malformación congénita que tiene en el pie izquierdo.
Al nacer le diagnosticaron pie equino y fémur corto congénito en la extremidad inferior izquierda por la falta del peronés, explicó a CiberCuba Thalía Ruiz Rodríguez, de 21 años y madre de la menor.
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Según dijo, el fémur de la niña dejó de crecer a las 26 semanas de gestación y a los tres meses le pusieron un cojín, porque una radiografía mostró que la cabeza del fémur no estaba en su lugar.
"Lo usó hasta los ocho meses", explicó Ruiz Rodríguez. "El doctor que se lo retiró me dijo que cuando la niña caminara se la llevara para indicarle botas ortopédicas y cuando cumplió su primer año así lo hice".
Pero cuando llevó a su hija al especialista este le indicó una operación del tendón de Aquiles para intentar corregir su pie equino y que lo pudiera flexionar. Tras esperar seis meses para entrar al quirófano, Lys de la Caridad no pudo ser operada porque se enfermó de una gripe.
No fue hasta que cumplió los dos años de edad que ingresó en el hospital Frank País, en La Habana, pero tampoco pudo llevarse a cabo la intervención quirúrgica porque había problemas en el fluido eléctrico y decidieron trasladarla al Pediátrico Juan Manuel Márquez.
"Ahí le hicieron análisis de todo tipo", contó la madre de Lys de la Caridad. "Un ortopédico se percató que cuando le quitaron el cojín a los ocho meses le afectaron la cadera, al punto de que está fuera de lugar y su crecimiento puede afectarle un órgano".
En la última consulta, el médico propuso como solución amputarle la pierna a la niña, algo que dejó desconcertada a toda la familia y comenzaron el proceso para buscar otra opinión médica.
A inicios de este año presentaron la solicitud de visa humanitaria en Estados Unidos pero fue denegada porque no contaba con los argumentos necesarios para demostrar la gravedad del caso. Luego decidieron recibir asesoría de un abogado experto en temas de emigración y es quien les lleva actualmente el caso.
"Todo se complicó con el tema del coronavirus. La embajada en La Habana está cerrada y hasta que no pase todo esto no podremos realizar la solicitud, aunque tenemos muchas esperanzas", dijo Ruiz Rodríguez.
Mientras tanto, la familia de la pequeña en Estados Unidos acopia a través de las redes sociales todos los esfuerzos necesarios para que pueda ser atendida en ese país. Aunque no tienen nada seguro hasta el momento, solo esperan que en la embajada norteamericana les den el visto bueno y comenzar el largo proceso de la operación y su posterior recuperación.
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