Al menos 30 muertos y 3.000 heridos ha dejado la fuerte explosión que tuvo lugar en Beirut, capital de El Líbano, en la tarde de este martes, según confirmó el ministro de Salud.
La Cruz Roja libanesa dijo que cientos de personas fueron trasladadas a centros para recibir tratamiento. El jefe de esa organización en el país advirtió que es probable que aumente el número de víctimas.
Entre los heridos se encuentran la esposa del primer ministro, Hasan Diab, y su hija.
Hassan Diab declaró que la ciudad está de luto y que el culpable de las explosiones rendirá cuentas: "Les prometo que esta catástrofe no pasará sin responsabilidad", dijo en un discurso televisado. "Los responsables pagarán el precio".
De acuerdo con los informes, muchos heridos ambulantes fueron rechazados en los hospitales para permitir que los más graves recibieran tratamiento.
También se reportaron grandes daños materiales, como el colapso de ventanas y balcones de departamentos, según reportó la agencia.
"Vi una bola de fuego y humo sobre Beirut. La gente gritaba y corría, sangrando. Los balcones fueron arrancados de los edificios. Los cristales de los rascacielos se rompieron y cayeron a la calle", contó un testigo de los hechos.
Por su parte, el presidente libanés, Michel Aoun, convocó a una reunión de emergencia del Consejo Supremo de Defensa del país.
Por el momento las autoridades desconocen las causas de los hechos, aunque existen varias versiones. Por una parte, el propio ministro de Salud Hamad Hassan declaró medios locales que las explosiones se atribuyen a un barco que transportaba fuegos artificiales, mientras que las fuentes de seguridad del Líbano negaron esta versión de los hechos, y aseguran que la explosión ocurrida en el área del puerto pudo haberse debido a los explosivos que guardan los almacenes del lugar.
Al respecto, el jefe de seguridad interna del Líbano, Abbas Ibrahim, dijo que no se adelantarán a las investigaciones.
"Se anunciarán los hechos sobre este peligroso almacén que ha estado allí desde 2014 y no evitaré las investigaciones", sostuvo.
Asimismo, en funcionario israelí aseguró que su país no estaba implicado en la explosión.
Esta cuenta como la explosión más poderosa que se registra en Beirut en años, tanto así que muchos pensaron que se había producido un terremoto.
Las imágenes que se han difundido en redes sociales muestran el desastre: la humareda, la nube de polvo y el fuego que apagó el cuerpo de bomberos de la capital libanesa.
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