Dos veteranos de la armada insular en Grandes Ligas, el torpedero José Iglesias y el cerrador Aroldis Chapman, se llevaron los máximos honores cubanos en la jornada de la víspera.
Candelita cerró el martes de 5-2 incluido el duodécimo tubey que consigue en el año, tercer total más alto para la Liga Americana. Así, el torpedero de los Orioles firmó su octavo desafío seguido con al menos un hit, y el quinto en que consigue más de un indiscutible.
Está encendido: desde el 15 de agosto batea .458 (24-11), y tales desafueros han dejado su slash line actual en un formidable .405/.415/.557. Con 80 o más comparecencias a la caja de bateo, nadie tiene un promedio más alto que el suyo en todas las Mayores.
Por su parte, Chapman logró su primer rescate del curso en el éxito 5x3 de los Yanquis sobre los Rays con faena que se resumió en rolata al cuadro, línea al center y ponchete, todo ello con 13 lanzamientos.
Por cierto, uno de esos envíos pasó cerca de la cabeza de Mike Brousseau a casi 100 millas por hora y provocó un nuevo capítulo de calenturas entre ambos equipos, enemistados desde hace algún tiempo.
Los restantes bateadores cubanos actuaron como sigue: Lourdes Gurriel (Azulejos), 3-1 con su noveno doblete y una base; José Israel García (Rojos), 4-1; Jorge Soler (Reales), 4-1; José Dariel Abreu (Medias Blancas), 4-1 más anotada; Yasmani Grandal (Medias Blancas), 3-0 y transferencia; Luis Robert (Medias Blancas), 4-0; Yulieski Gurriel (Astros), 5-0; y Randy Arozarena (Rays), 1-0.
Por último, en causa perdida ante los Cardenales, Raisel Iglesias (Rojos) estiró el brazo en el séptimo inning y le dieron dos hits, regaló un boleto y le marcaron una carrera sucia, lo cual dejó su promedio en 5.06.
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