El municipio costero de Gibara, en la oriental provincia Holguín, ha amanecido este sábado conmocionado tras el hallazgo del cuerpo sin vida de un adolescente de 16 años, que desapareció en el mar cuando salió a practicar pesca submarina, según testigos de lo ocurrido.
Este viernes, tras varias horas de búsqueda, un grupo de pescadores encontró el cadáver del menor de edad, vecino del barrio del Güirito. A falta de que le practiquen la autopsia, todo indica que el adolescente falleció por accidente cuando practicaba submarinismo.
Vecinos de Gibara, que participaron en la búsqueda del menor desaparecido, junto a un barco guadafronteras, pescadores privados y efectivos de Cruz Roja, dan por hecho que el joven murió de un "blackout" (muerte cerebral repentina provocada por las altas presiones).
El joven fallecido se llama Silvio Ramos Alabreda, alias Pipito. Es hijo de Lisandra Alabreda, una vecina muy conocida en Gibara porque trabaja de custodio en el hospital del pueblo. El muchacho era muy luchador, según el testimonio de quienes le conocían, y se dedicaba a la pesca submarina, sobre todo de pulpos, aunque no solía alejarse mucho de la costa.
En el pueblo creen que esta muerte se podía haber evitado si el adolescente no hubiera ido a pescar solo. Hace un tiempo ocurrió un accidente similar, pero el buceador iba acompañado por otros submarinistas, que lo sacaron a tierra y consiguieron que fuera trasladado en helicóptero a un hospital de Santiago de Cuba.
La mayoría de los testimonios a los que ha tenido acceso CiberCuba coinciden en que el fallecido salió a pescar entre las 3:00 pm y las 4:00 pm. Sin embargo, a la una de la madrugada no había regresado y vecinos, familiares y amigos lo buscaban incesantemente. La costa de Gibara se llenó de luces de barcos que intentaban localizar al adolescente desaparecido.
Finalmente, un grupo de pescadores encontró el cadáver, con signos de haber sufrido un 'blackout' porque estaba con el rifle en la mano, disparado sin hacer blanco. Al parecer, "el cinturón de plomo lo mantuvo sumergido y no le dio tiempo a subir a la superficie. En una mano tenía la careta, supuestamente en un intento desesperado de salir a flote", señala una persona que estuvo presente en el lugar de los hechos.
Tras la recuperación del cuerpo se vivieron escenas muy duras cuando la hermana del fallecido se arrodilló delante del cadáver y comenzó a preguntarle que por qué le había hecho eso, si ella le había advertido de que no se fuera solo a pescar.
En un vídeo al que ha tenido acceso CiberCuba, se ve cómo tienen que sostener a la hermana del fallecido, rota de dolor, que no se sostenía en pie, ante la mirada y el silencio de todos sus vecinos, que formaron un coro alrededor del cadáver, cubierto con una sábana blanca.
Los ahogamientos y sumersiones, tercera causa de muerte en Cuba
Los ahogamientos y sumersiones accidentales constituyeron la tercera causa de muerte en Cuba entre los años 1987 y 2002, según el estudio de los doctores cubanos Mariela Hernández Sánchez, René García Roche, Francisco Valdés Lazo, Georgia Díaz Pereda y Lilian Ferrer para la Revista Cubana de Higiene y Epidemiología.
Esta investigación revela que las provincias con mayor tasa de ahogamientos en la Isla son Santiago de Cuba, Las Tunas, Holguín y la Isla de la Juventud.
En 2018 (últimos datos disponibles en el Anuario Estadístico de Salud) la tasa de ahogamientos y sumersiones accidentales en Cuba era de 2,2 por cada 100 000 habitantes, muy superior al 1,9 registrado en 2017.
Hace dos años fallecieron por ahogamiento y sumersiones accidentales en Cuba 244 personas (227 hombres y 17 mujeres). La mayoría de las víctimas del sexo masculino estaban en la franja de edad comprendida entre los 40 y los 59 años, mientras que del sexo femenino eran niñas de menos de 10 años.
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