La Habana guarda silencio mientras la empresa turística Meliá lamentó la muerte del experto en seguridad de Cubana de Aviación Luis Alberto Lima Mesa, al que identifica como "cliente y tripulante", debido a las graves heridas sufridas por el desprendimiento de un ascensor en el hotel Meliá Habana, según un comunicado de la compañía española enviado este miércoles a CiberCuba.
Meliá, que permaneció atenta a la evolución hospitalaria de Lima Mesa, asegura en su nota que colabora con las autoridades cubanas "para esclarecer los hechos" y que aguardará el resultado de las investigaciones para emitir nuevos pronunciamientos.
"En el momento del incidente, todos los elevadores de la instalación contaban con su correspondiente licencia operativa, la cual había sido renovada en enero con una vigencia de un año. Periódicamente se llevaban a cabo las inspecciones técnicas requeridas para garantizar su correcto funcionamiento. Tras lo ocurrido, el hotel tomó la decisión de paralizar todos los elevadores, con el objetivo de realizar una nueva revisión, por parte de la empresa certificadora, que ratifique su correcto estado técnico y permita retomar su funcionamiento", expresa el comunicado de la compañía fechado en La Habana este martes.
Una fuente de la empresa COMETAL, supuesta encargada del mantenimiento de los elevadores del Meliá Habana, dijo a 14 y Medio que la caída del ascensor panorámico pudo haber sido consecuencia de un “fallo en la programación” debido a un “error humano” al configurar su sistema, aunque no se publicó una copia del contrato entre los explotadores del hotel y la empresa especializada en reparación y conservación de ascensores.
Al momento de redactar esta nota, el Gobierno cubano, la aerolínea Cubana de Aviación para la que trabajaba el fallecido y Cubanacán, S. A. mantienen silencio sobre el accidente del 12 de septiembre, cuando el desprendimiento de un ascensor en el hotel Meliá Habana causó graves heridas al "cazabomba" Lima Mesa, que acabó falleciendo el 28 en el hospital Calixto García.
CiberCuba intentó obtener una copia del Seguro de Responsabilidad Civil que ampara la explotación del Meliá Habana y preguntó por la identidad corporativa de un posible socio de la empresa española en la gestión y administración del hotel habanero, pero la portavoz de la compañía remitió al comunicado y dijo que no ofrecerían nuevas informaciones, precisó en mensaje posterior, una funcionaria del área de Comunicación de la empresa, con sede en Palma de Mallorca.
El hotel Meliá Habana fue inaugurado en 1998 y, en sus primeros años, funcionó con un acuerdo a tres bandas entre la entidad mallorquina, Cubanacán, S. A. y el empresario canario Enrique Martinón, que vendió su participación a un tercero no identificado, tras su "caída en desgracia" por la llegada de Raúl Castro al poder, tras la enfermedad de Fidel Castro, amigo y principal valedor de Martinón en La Habana, donde apadrinó su boda con una médico cubana de la que se divorció tras tener dos hijos.
CiberCuba ha intentado obtener una versión de los hechos del Grupo Cubanacán, S.A., que sería el propietario formal del hotel Meliá Habana, pero todos los intentos de comunicación con la empresa, en el (53-7) 833.40.90, incluido el marcado de las extensiones de Presidencia (1), Empresas Mixtas (601) y Departamento Jurídico (416) han resultado infructuosos; pese a que el sistema de contestador automático indica que remite a una operadora.
Pero una fuente de la Inmobiliaria PALCO aclaró que Cubanacán no sería el dueño administrativo del hotel sino que, a su vez, lo tendría arrendado al dueño designado por el gobierno castrista que sería la Empresa Inmobiliaria del Turismo, (EIT), que agrupa los principales inmuebles dedicados a la actividad turística, pero no pudo precisar si está subordinada al ministerio del sector o al complejo militar-empresarial GAESA.
CiberCuba ha hablado con juristas y expertos en Seguros de La Habana sobre el accidente y los primeros coinciden en señalar que el caso podría tener derivaciones Penales y Civiles, mientras que los segundos sostienen que la empresa aseguradora contratada por los gestores del hotel deberá asumir la indemnización a la familia del fallecido, sin renunciar a la opción de reclamar a la aseguradora de la empresa de mantenimiento.
En el ámbito Penal, el enjuiciamiento y posibles sanciones estarían contemplados en delito de Homicidio porque el resultado que se provocó fue la muerte de una persona, según el artículo 261 del Código Penal (CP).
Las sanciones establecidas para el delito de Homicidio son de 7 a 15 años de privación de libertad, aunque si se probara que ocurrió como resultado de una "imprudencia" enfrentarían penas de 5 días a 8 años de privación de libertad y multa de cinco a mil quinientas cuotas pero, como la sanción por imprudencia no podrá exceder la mitad de la establecida para cada delito en particular, quedaría la condena a prisión entre poco más de tres y siete años y medio de privación de libertad, ponderan los juristas.
La policía cubana deberá abrir una investigación penal de oficio, que correspondería a la Unidad de Investigación Criminal del municipio Playa, donde está ubicado el Meliá Habana, pero los familiares de Lima Mesa también pueden ejercer su derecho a acusar de Homicidio a los supuestos culpables, y "deberían pedir amparo a la fiscalía" para que les informe del resultado de la investigación y determinación de la responsabilidad, y asistirse de un abogado en materia civil para articular la posible reclamación en esa jurisdicción, recomiendan los letrados cubanos consultados.
En los casos de delitos sancionados en vía penal, el tribunal en su sentencia dispondrá la responsabilidad civil derivada del mismo como condena al sancionado, consistente regularmente en sus obligaciones civiles, si las tuviere, respecto a pensiones alimenticias a hijos menores y subsidio a la esposa, considerando en este último caso que la misma puede acceder también a la retribución de la seguridad social, cuestiones que estarán por dilucidarse en el juicio penal, concluyen los juristas.
Sobre la indemnización a percibir por los familiares de Lima Mesa, los expertos en Seguros afirman que se pagará en la moneda en que esté suscrita la póliza; dudan que el contrato pueda estar reasegurado con empresas internacionales, porque no es norma en Cuba en ese tipo de acuerdos; y ni los unos y los otros se atreven a estimar el monto porque "la legislación cubana no establece una baremación para determinarlo".
Lima Mesa deja viuda a su señora Eliset y dos hijas huérfanas, Claudia y Eliset y "muy consternados" a sus padres, Teresa y Alberto, según fuentes del Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba (IACC) que rehusaron ser identificadas, y que aseguraron la inhumación se realizó el 29 de septiembre,a las 14:00 horas de La Habana, en el cementerio de Santiago de Las Vegas, en el sur de capital y próxima al aeropuerto internacional José Martí.
A continuación, reproducimos la nota de la empresa Meliá:
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