El Gobierno de Emiratos Árabes Unidos publicó un grupo de reformas legales entre las que despenaliza el consumo de alcohol y la convivencia entre personas no casadas.
Las reformas se hicieron públicas este sábado y son de aplicación inmediata. Además de autorizar la convivencia entre personas no vinculadas por sangre ni casadas y permitir el consumo de alcohol (en privado), se penaliza los denominados "crímenes de honor".
Europa Press destacó que esta medida da peso a los derechos de las mujeres, al dejar de reconocerse la figura del "crimen de honor" por el que un familiar de una fémina tenía esa condición como atenuante en caso de violencia contra esa mujer para "proteger su honor".
Las nuevas reformas endurecen las penas para cualquier tipo de agresión a mujeres. El objetivo es disminuir el acoso en las calles. Se aplicará pena de muerte por la violación de una menor o de una persona con algún tipo de discapacidad.
Otra despenalización está vinculada con los suicidios o intento de suicidio. En este sentido el gobierno señala que si se sorprende a alguien ayudando a otra persona a suicidarse, podrá ser condenada a prisión.
Respecto al alcohol, la venta a menores estará penada. Sin embargo, a los mayores de 21 años se les podrá vender con licencia, podrán poseer y consumir alcohol en privado o en lugares con permisos para ello.
Es la primera vez que la ley permite la cohabitación legal de parejas no casadas. En Emiratos Árabes estaba incluso prohibido compartir una vivienda entre personas de sexo opuesto que no fueran familiares.
Otra de las medidas que destaca la prensa en la nueva legislación es que se permite aplicar la ley del país de origen de los extranjeros en casos de divorcio y herencias en lugar de la sharia o ley islámica que se usaba hasta ahora.
Esta medida es de gran repercusión pues el 90 por ciento de la población del país es extranjera. La excepción para separaciones es el patrimonio adquirido en Emiratos Árabes durante el matrimonio.
Las regulaciones legales que impulsa el Gobierno de Emiratos Árabes amplían las libertades individuales y refleja el perfil cambiante del país. Buscan fortificar la imagen de una nación moderna, abierta a los cambios y atractiva para el turismo occidental y para nuevos empresarios dispuestos a invertir.
Una de las personalidades cuya estancia en Emiratos fue reflejada por los medios, es el rey emérito de España, Juan Carlos I. En agosto la Casa Real confirmó que se encontraba en ese país árabe tras conocerse públicamente aspectos comprometedores de su vida privada pasada.
Según indica el DailyMail, aunque se trata de importantes reformas en el ámbito social también se espera que tengan fuerte efecto en el aspecto cultural y especialmente en el económico.
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