Opositor cubano Juan Antonio Madrazo Luna detenido arbitrariamente por la policía

El opositor cubano Juan Antonio Madrazo Luna, coordinador nacional del Comité Ciudadano para la Integración Racial (CIR), narró a CiberCuba los detalles de su arresto arbitrario y el interrogatorio al que fue sometido por agentes de la Seguridad del Estado luego de ver cómo le decomisaron varias pertenencias en su propio domicilio.

Al menos seis oficiales del Ministerio del Interior irrumpieron en su domicilio, sede del CIR, con una supuesta orden de allanamiento que les permitía decomisar los materiales de trabajo del opositor, así como los equipos electrónicos que utiliza y varios dispositivos de almacenamiento.

"Revisaron los libreros de la casa, las mesas de trabajo, las gavetas, mis pertenencias pertenencias y las de mi hermana", contó a este medio el opositor cubano a través de un intercambio de mensajes.

Aseguró que le fue decomisada una importante cantidad de dinero en dólares norteamericanos, una parte de ella eran ahorros que tenía para reparar la cocina de su vivienda, así como una impresora, dos computadoras, equipos de grabación, discos de almacenamiento externo así como documentos de trabajo.

Tras la revisión y el decomiso, Madrazo Luna fue conducido a la estación de la Policía de las calles Zapata y C, pero antes de ser montado en el coche advirtieron a la hermana del opositor que no tomara fotos desde el balcón.

En la unidad policial Madrazo Luna asegura que estuvo por lo menos una hora, pero decidieron trasladarlo para la Unidad de Investigaciones Criminales del municipio Playa, en 7ma y 62, donde permaneció en una celda unas tres horas.

Transcurrido ese tiempo, contó el defensor por los derechos raciales en Cuba, fue interrogado por dos oficiales que se identificaron como primer teniente Ricardo y capitana Beatriz.

Al parecer el objetivo era conocer el vínculo de Madrazo Luna con el activista Esber Rafael Ramírez, residente en Antilla, Holguín, y que fue detenido recientemente de manera arbitraria por la policía de esa provincia.

"Yo lo único que respondí es que era un buen activista y amigo", lo que hizo que los oficiales "explotaran de la rabia, según la versión del opositor.

"Dijeron que Rafael era un delincuente y que no entendían por qué el CIR trabajaba con tipos así y que eso lo único que hacía era facilitarle el trabajo a ellos para desacreditarnos porque no somos defensores de los derechos humanos", agregó.

Durante el interrogatorio profesaron también insultos contra otros activistas, opositores y defensores de derechos humanos en Cuba y relacionándolos con supuestas actividades ilícitas.

"Tenemos información suficiente para procesarlos como lo exige la ley; sabemos como entra el dinero además ustedes se cuidan bien poco y eso nos facilita mejor el trabajo", dijeron los agentes de la Seguridad, quienes además le dijeron a Madrazo Luna que debía estar agradecido a la Revolución porque él se beneficia de los esfuerzos que hace para alcanzar el mejoramiento humano.

Tras ser interrogado, el opositor volvió al calabozo y en horas de la madrugada sostuvo otro encuentro con un oficial que se identificó como el mayor Malvin, de la Contra Inteligencia, quien le amenazó con aplicarle la Ley 88 (Ley Mordaza por la que fueron procesados en el 2003 un grupo de 75 cubanos opositores).

"No vamos a permitir actividades públicas cualquier desafío vamos a tomarlo como una provocación", afirmó el oficial cubano.

En el interrogatorio se hizo mucho hincapié en el financiamiento de estas organizaciones opositoras, con dinero que procede de la USAID y la NED y no faltaron las amenazas para infringir temor en los activistas y opositores cubanos.

"Según el oficial de Seguridad pronto nos veríamos las caras", pero antes de despedirse e aseguró a Madrazo Luna que no le iban a quitar el pie.

El Observatorio Cubano de Derechos Humanos condenó el arresto arbitrario que sufrió el coordinador nacional del Comité Ciudadano para la Integración Racial.

"El OCDH condena la represión sistemática del gobierno de Miguel Díaz-Canel contra los activistas anti-racismo en la isla. Resulta intolerable que un gobierno recién elegido miembro del Consejo de Derechos Humanos de la ONU se aproveche siempre de los momentos de incertidumbre internacional, para avanzar posiciones, en su permanente enfrentamiento a las voces disidentes y a la sociedad civil y continúe acosando, deteniendo y robando instrumentos de trabajo a los activistas que trabajan pacíficamente por la igualdad racial y el respeto a los derechos fundamentales", indicó la organización.