El colombiano J Balvin y el puertorriqueño Bad Bunny se convirtieron en dos de las mayores estrellas de la 21ª edición de los premios Grammy Latinos, los cuales se celebraron la pasada noche del 19 noviembre en la ciudad de Miami (Florida).
Ambos cantantes de música urbana fueron unos de los artistas elegidos para animar la ceremonia con su música, por lo que regalaron a los espectadores unas impresionantes actuaciones en las que dieron voz a algunos de sus temas más famosos.
J Balvin realizó una emotiva interpretación de su sencillo Rojo, en la que hizo alusión con imágenes que proyectó en una gran pantalla en el escenario a algunos de los duros momentos por los que ha pasado la humanidad durante este 2020, como han sido las catástrofes ambientales o la pandemia del coronavirus.
El colombiano también dejó boquiabierto a más de uno luego de que en medio de su show su traje comenzó a soltar sangre como si su corazón se hubiese roto en mi pedazos por el dolor que sufre el mundo.
El Conejo Malo tampoco dejó indiferente a nadie con su presentación. El boricua sorprendió al aparecer en plena calle de Puerto Rico en su nuevo auto deportivo Bugatti Chiron acompañado de varias bailarinas que se desplazaban en moto mientras cantaba su sencillo Bichiyal.
Momentos después, Bad Bunny cambió de escenario y de vestuario para dar voz a su éxito Si veo a tu mamá junto a una banda de músicos de mujeres mayores.
"Latin Grammy desde LA CAPITAL DEL REGUETÓN ¡Gracias a todas las que hicieron de esta presentación una ÉPICA! A las verdaderas diablas en las máquinas a y la super talentosa banda LAS ATÍPICAS en Si veo a tu mamá ¡Fue un gustazooo compartir con todas!", expresó Bad Bunny en Instagram junto a varias imágenes que recogen algunos momentos de su show.
Además de entretener con sus impresionantes actuaciones, los dos reguetoneros eran aspirantes a varios de los premios más importantes que ofrecía durante la noche la Academia Latina de la Grabación.
J Balvin contaba con 13 menciones en distintas categorías, lo que lo convirtió en el artista con más nominaciones en una misma edición en los 21 años de historia de los famosos premios musicales.
Dicha meta le valió además para ser reconocido con un Récord Guinness por obtener la mayor cantidad de nominaciones al Grammy Latino en un año. Bad Bunny, por su parte, le pisó los talones tras obtener 8 nominaciones.
No obstante, aunque ambos coincidieron en varias secciones, la categoría a Mejor Álbum de Música Urbana, una de las más importantes, fue J Balvin quien finalmente se llevó el premio a por su disco Colores, arrebatando así el galardón al puertorriqueño que se posicionaba como uno de los grandes favoritos de la ceremonia.
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