Un grupo de niños en Cuba recreó este domingo 27 de diciembre la batalla de Santa Clara, un acto que anualmente exalta uno de los hechos que llevó a Fidel Castro al poder, y cuya conmemoración ni la pandemia de coronavirus consiguió evitar.
“Pioneros de #VillaClara reeditan la histórica BatallaDeSantaClara protagonizada por el Che y las tropas rebeldes bajo su mando. La historia se hace viva cuando deja los libros y reencarna en las nuevas generaciones de cubanos”, publicó en Twitter del diario local Vanguardia.
En las fotos se puede observar la aglomeración de niños en un acto en el que no fueron respetadas las distancias de seguridad recomendadas para frenar los contagios de coronavirus.
Cuba ha tenido un repunte de casos en las últimas semanas, este lunes 28 de diciembre el MINSAP reportó 229 nuevos infectados, cifra que rompió récord de contagios diarios desde el inicio de la pandemia.
Las imágenes compartidas revelan a decenas de niños vestidos de verde olivo y portando brazaletes del Movimiento 26 de julio. Aunque llevan mascarillas, la actual situación epidemiológica en Cuba desaconseja la aglomeración de personas.
El acto también incluyó una visita al Parque Zoológico de Santa Clara "en saludo al 62 Aniversario del triunfo de la Revolución", según revelan fuentes locales.
Una publicación de la emisora radial Cmhw, el pasado 23 de diciembre, anunció que la toma simbólica de Santa Clara seguiría “estrictamente todos los protocolos sanitarios para evitar el COVID-19”, y que el acto estaría precedido por conmemoraciones similares en otros municipios como Placetas y Manicaragua.
Escenas similares son frecuentes en las escuelas cubanas, en las que cualquier acto reviste características políticas y en las que abunda la propaganda gubernamental, siempre al amparo del mantra nacional: "¡Pioneros por el comunismo, seremos como el Che!".
Uno de los clásicos de ese adoctrinamiento pioneril es el concurso "Amigos de las FAR", donde a menudo el jurado premia a niños que dibujan escenas de guerra.
En octubre de este año, la Organización no Gubernamental Red Femenina de Cuba, llamó a realizar una reforma de la Ley de Educación para acabar con el adoctrinamiento en las escuelas y avanzar en el principal objetivo de la educación: el desarrollo integral de la persona.
El objetivo de la educación queda absolutamente desvirtuado, pasando a ser sencillamente un adoctrinamiento, manifestó Elena Larrinaga, directora ejecutiva de la Red Femenina de Cuba.
Una educación sesgada ideológicamente que, según la citada ONG, “neutraliza el principal objetivo de la educación, que es el de permitir a todas las personas que desarrollen, sin distinciones, todas sus capacidades y talentos. Es decir que todas las personas evolucionen independientemente de sus características personales, sociales y culturales”.
El método educativo en Cuba se basa en la negación de la libre expresión y encarna la esencia misma del adoctrinamiento. “Estas prácticas educativas y de propaganda han estado encaminadas a inculcar determinados valores o formas de pensar en los sujetos a los que van dirigidas y les priva de tener elementos de juicio necesarios para tomar sus propias decisiones”, concluyó la Red Femenina de Cuba.
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