El Jefe de la Comisión de los Lineamientos, Marino Murillo Jorge, anunció este lunes la disminución de las tarifas eléctricas tras fuertes presiones de la población.
Según reconoció el propio miembro del Buró Político en la Mesa Redonda, entre las principales opiniones recogidas por la población están la incoherencia entre el salario y el resto de los precios por bienes y servicios que también se incrementarán, y el "excesivo" salto de 4.00 CUP a 7.50 CUP para consumidores del rango 301-350 kWh/mes.
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No obstante, Murillo advirtió que aunque se aplicaría una reducción, había que mantener una tarifa que "incentive y estimule a la población al ahorro de energía".
La tarifa modificada es ahora de 0,33 pesos cubanos en el tramo de consumo de 0 a 100 kWh, de los 0,40 anunciado para el ordenamiento. Los tramos de 301-350, 351-400 y 401-450 kWh/mes son los que tuvieron la mayor reducción con respecto a la tarifa anunciada, con una modificación de 7,50 a 4 pesos; 9 a 5 pesos y 9 a 6 pesos, respectivamente.
Sin embargo, los nuevos precios continúan siendo elevados con respecto a la tarifa actual.
Asimismo, se anunció la separación de las tarifas eléctricas de consumo residencial de las de la actividad productiva en los negocios privados.
Luego de que el gobernante Miguel Díaz-Canel anunciara el inicio del ordenamiento monetario a partir del 1ro de enero próximo, la Gaceta Oficial de Cuba publicó las nuevas tarifas de servicios, entre las que destacó la electricidad, que generó gran indignación al subir poco más de cuatro veces con respecto a la tarifa actual.
En octubre del 2010 ya el gobierno había aumentado las tarifas de la electricidad doméstica, manteniendo los mismos precios hasta 300 kWh por mes, pero las nuevas tarifas anunciadas para el ordenamiento desataron una ola de críticas entre cubanos de todas las ideologías, cuestionamientos abiertos y solapados e indignación y descrédito generales, por ser consideradas abusivas.
Marino Murillo dijo en ese momento que el aumento del precio de la electricidad fijado a partir del año próximo se había diseñado "para proteger a las personas integralmente", y justificó con argumentos tales como que en un núcleo familiar había más de un salario pero "todos cogían el mismo aire [acondicionado]", lo cual fue asumido como muchos como una falta de respeto y una burla hacia la población.
Las críticas se aunaron al hecho de que, en enero, no será la tarifa eléctrica la única que aumente y que realmente el aumento del salario mínimo a 2100 pesos cubanos que anunciaron por todo lo alto, no servirá de nada con precios tan altos en los consumos básicos.
Ante la ebullición social, Díaz-Canel dijo en la Asamblea Nacional que "se revisará lo que haya que revisar y se corregirá lo que deba y pueda ser corregido".
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