Vídeos relacionados:
El mánager y ex jugador Tomy Lasorda, leyenda del béisbol de Grandes Ligas, falleció la noche de este jueves en la ciudad de Los Angeles, según informó el equipo de los Dodgers. Tenía 93 años.
Lasorda, quien dedicó gran parte de su vida a trabajar para la organización de los Dodgers, sufrió un paro cardiorespiratorio en su casa y fue trasladado de urgencia hacia un hospital, donde falleció minutos más tarde.
Lo más leído hoy:
La franquicia de los Dodgers lamentó su muerte y le agradeció por 71 años de servicio “con sangre azul corriendo por sus venas”. Sus últimos 14 años los pasó como consejero del manager general del equipo.
Lasorda fue mánager de los Dodgers entre 1976-1996 y llevó al equipo a ganar las Series Mundiales de 1981 y 1988, la última del conjunto californiano hasta que se impusiera en 2020. Con los Dodgers conquistó además cuatro títulos de la Liga Nacional y ocho coronas de división. Fue nombrado dos veces Manager del Año de la Liga Nacional y fue elegido al Salón de la Fama del Béisbol en Cooperstown en 1997.
Embajador de los Clásicos Mundiales de 2006 y 2009, se caracterizó por darle la bienvenida a la Gran Carpa a jugadores de México, República Dominicana, Japón, Corea del Sur entre otros países, por lo que muchos han llegado a reconocer que el número uno en su currículo sería el ser un “excelente embajador del béisbol”, como dijera en una ocasión su compañero de equipo, el lanzador Orel Herschiser.
Lasorda hablaba perfectamente español, lo que favoreció su relación con los jugadores latinos del béisbol profesional alrededor del mundo.
Fue pitcher del equipo Almendares de la Liga Profesional Cubana en los años 50. Sin embargo, una de las cosas por la que más los cubanos podrían recordarlo fue porque dirigió al equipo de Estados Unidos que derrotó a Cuba en la final de los Juegos Olímpicos de Sídney 2000.
En ese entonces, ambos equipos habían llegado a la final con idéntico balance de seis victorias y una derrota. Cuba había derrotado a Japón en su semifinal por blanqueada de 3-0, mientras los norteamericanos habían hecho lo mismo con Corea del Sur, por 3-2. En la ronda previa, Cuba había vencido a Estados Unidos en un juego muy fuerte desde el punto de vista físico, con marcador de 5-1.
En la final, el equipo estadounidense se impuso de manera inobjetable por 4-0, con pitcheo del estelar Ben Sheets, rompiendo el mito de la invencibilidad del béisbol cubano en torneos amateurs. El equipo Cuba perdió así la oportunidad de coronarse por tercera vez consecutiva en unos Juegos Olímpicos.
En Vero Beach, Florida, la calle que conduce al complejo de los Dodgers en esa ciudad se llama Tomy Lasorda desde 1997, año en que también fue retirado su dorsal con el número 2 por la organización profesional. En 2010 fue exaltado al Salón de la Fama del Deporte Cubano en Miami.
Archivado en: