El Instituto de Aeronáutica Civil de Cuba informó que las autoridades de Estados Unidos comenzarán a exigir una prueba PCR negativa para los viajeros que intenten ingresar al país.
“A partir del próximo 26 de enero, EE. UU. exigirá a los viajeros de dos años de edad o más, que se trasladen a su territorio desde cualquier país extranjero, la presentación de una prueba de SARS-Cov-2 con resultado negativo”, informó un comunicado.
La muestra para la prueba debe haber sido tomada con un máximo de tres días de antelación al viaje, de lo contrario no será efectiva.
Como otra alternativa, los viajeros podrán presentar un resultado positivo anterior y un documento de autoridades sanitarias certificando su recuperación posterior de la enfermedad.
Estas pruebas podrán ser enseñadas de modo digital o a través de una copia física, lo que debe ser verificado por la aerolínea transportista y conservado por un periodo de dos años.
Según el propio comunicado, algunas aerolíneas se han preocupado en “conocer cómo y dónde podrían sus pasajeros obtener esta documentación en Cuba a fin de poder informarlo a sus clientes”, aunque este no ofrece una respuesta.
Sin embargo, de acuerdo con informaciones oficialistas en diciembre, los cubanos que deseaban salir de su país hacia otro que exigiera una prueba negativa de coronavirus deberían pagar la suma de 40 CUC para obtener un PCR, o su equivalente en CUP u otra divisa como euros o dólares.
No se sabe si este precio se verá afectado por la unificación monetaria entrada en vigor el primero de enero de este año, que ha eliminado el CUC y ha alterado la mayoría de los precios en los servicios estatales.
El procedimiento para obtener y justificar la prueba PCR implica rellenar una solicitud con los motivos del viaje, pagar la suma que dinero establecida, y presentar la factura de pago a la institución médica establecida en cada territorio para la realización del examen.
Desde el pasado 10 de enero, entró en vigor la regulación del gobierno cubano que exige a los viajeros procedentes del extranjero un examen PCR negativo con un máximo de 3 días de antelación.
La medida fue establecida tras la subida de casos positivos que la isla experimentó después de que sus aeropuertos volvieran a operar vuelos internacionales el pasado Noviembre.
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