Salvatore Anello, el abuelo de la niña que murió tras caer de un crucero en Puerto Rico, fue condenado este lunes a tres años de probatoria.
Los hechos ocurrieron el 7 de julio de 2019 mientras la embarcación Freedom of the Seas estaba anclada en el muelle Panamericano II en San Juan.
Anello asomó a la pequeña, de 18 meses, a un balcón imaginando que había un cristal protector, y de repente se le desplomó hacia el vacío, según declaraciones del acusado durante el proceso investigativo.
Salvatore se había declarado culpable de homicidio negligente el año pasado, sin embargo esta sentencia “en probatoria” significa que no irá a la cárcel en tanto cumpla con las condiciones que se le imputan por parte del tribunal.
“El acusado no fue a Puerto Rico, sino que compareció a través de videoconferencia. Este es el escenario más favorable posible aunque no es un final feliz de ninguna manera por la tragedia que atraviesa aun la familia”, expresó Walter Soto León, periodista de Telemundo.
La familia aún está en shock después de este triste accidente. Entre los miembros que vacacionaban en el crucero se encontraban los abuelos paternos y maternos, sus padres y un hermanito mayor.
Una carta de la madre de la niña fue presentada durante la audiencia, esta recomendaba que se le sentenciara a probatoria; al respecto la fiscal del caso Laura Hernández declaró: “Ese informe fue favorable, de haber sido negativo, el día de hoy la sentencia hubiese sido una pena de reclusión y se hubiese ordenado el traslado de Salvatore a Puerto Rico para que la cumpliera".
El contenido de esta carta es confidencial, expresó la fiscal, y fue algo que el tribunal tomó en cuenta al momento de dictar la sentencia.
Kimberly Wiegand, la mamá de la niña, imploró que se le impusiera el menor de los daños, ella funge como fiscal en Indiana, su estado natal.
El cotejo de las condiciones para cumplir la sentencia será verificado por oficiales interestatales en Michigan, Estados Unidos, de donde proviene el imputado, reporta Soto León.
Miembros de la familia de la pequeña Chloe Wiegand intentaron denunciar a la compañía de cruceros Royal Caribbean, pero esta alegó que las cámaras de seguridad muestran que Anello es el responsable de lo que le sucedió a la niña.
En una moción presentada en la corte federal en el Distrito Sur de Florida, la empresa alegó que "incuestionablemente" Salvatore Anello sabía que la ventana estaba abierta en el momento en el que cargó a la niña y perdió el control sobre ella.
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