Vídeos relacionados:
LA HABANA, 10 feb (Reuters) - Un grupo de jóvenes cubanos cambió los entrenamientos de fútbol por el "golfito" en un improvisado campo de siete hoyos en las afueras de La Habana, donde buscan contrarrestar el estrés tras casi un año de encierro dada la propagación del coronavirus en la isla.
Protegidos con sus mascarillas y manteniendo el distanciamiento físico, así como la desinfección de las manos, los jóvenes se enfocan en el golf aunque sin dejar de preocuparse, ya que la presencia del virus se ha incrementado en la isla desde el comienzo de la enfermedad en marzo.
Lo más leído hoy:
"Como no podemos jugar fútbol, porque el fútbol es más tumultera cogimos el golfito, es menos gente y con el bastón siempre nos limpiamos las manos, y tenemos más espacio para estar distanciados", dijo Edi Gómez muy cerca de una pelota que intentaba colocar en uno de los hoyos.
El golf ha sido un deporte elitista en Cuba y mientras las autoridades del turismo han intentado la construcción de nuevos campos con participación de empresas extranjeras, sólo dos se mantienen funcionando en el país: Uno en La Habana y otro de 18 hoyos en el balneario de Varadero, a unos 140 kilómetros al este de la capital.
"La policía no nos regaña y nos dejan jugar. El único deporte que nos dejan ahora mismo es éste", dijo Gómez en referencia a las medidas de restricción de las autoridades cubanas.
Utilizando implementos rústicos como tablas de madera, aunque con pelotas profesionales, los jóvenes reciben primero sus clases por la televisión estatal al permanecer sus escuelas cerradas temporalmente y luego bajan al campo de golf paliando su gran dosis de ansiedad.
Autoridades locales han insistido una y otra vez en los peligros que representa la mortal enfermedad que apareció en China a finales de diciembre de 2019. En la isla se reportan 261 fallecidos desde marzo, pero en febrero se han disparado los números con un promedio diario de casi 900 casos diagnosticados.
En los primeros meses de 2020, Cuba había conseguido frenar en gran medida la enfermedad, aislando a pacientes y realizando un seguimiento riguroso casa por casa de los contactos, herramientas que ha vuelto a retomar para contener la pandemia.
La Habana sostiene que gran parte de los enfermos está vinculada a viajeros que no cumplieron con los protocolos sanitarios al llegar a la isla y ha recortado los vuelos internacionales.
"Aquí nosotros no tenemos posibilidades de tener todo original (para el golf), con las peloticas sí tenemos posibilidades de tenerlas. Hay jóvenes que tiran con palos, con otras cosas y así, para no demorar el juego", añadió Gómez.
Reporte de Reuters TV. Escrito por Nelson Acosta, editado por Javier Leira.
Archivado en: