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Las autoridades del sector alimentario en Sancti Spíritus detectaron violaciones en la calidad e inocuidad de los alimentos que se producen en las empresas láctea y cárnica del territorio, así como en numerosas panaderías y dulcerías.
Inspectores del Ministerio de la Industria Alimentaria (MINAL) denunciaron ante el gobierno provincial la existencia de malas prácticas de higiene y de manipulación de los alimentos, así como el incumplimiento de la obligación de hacer ensayos a los insumos y a los productos ya terminados.
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Según el periódico Escambray, estas irregularidades se detectaron en casi todos los establecimientos de la Empresa Láctea Río Zaza, fundamentalmente en la Pasteurizadora y sobre todo en las líneas del yogur de soya y los helados, así como en unidades dedicadas a la producción de picadillo y embutidos de la Empresa Cárnica.
Asimismo, en las panaderías y dulcerías se comprobó que habitualmente se violan las buenas prácticas de manipulación del producto, condiciones higiénicas y cartas tecnológicas.
En general, los inspectores encontraron descontrol en los procesos productivos, violaciones sistemáticas de las cartas tecnológicas, una grave obsolescencia tecnológica y un pobre seguimiento a la calidad e inocuidad de los alimentos, deficiencias todas que ya se detectaron el año pasado.
La mala calidad de los alimentos que se producen en las industrias cubanas, algunas de las cuales se venden por la libreta de abastecimiento, ha sido denunciada con frecuencia por los consumidores.
Esta semana una camagüeyana mostró en las redes sociales el pésimo estado del picadillo que la empresa cárnica de ese territorio vendió a la población. La joven compartió dos fotos del producto, el cual exhibía una muy mala apariencia.
"Miren, pueblo de Cuba. Mira, gobierno que lucha para el pueblo y por el pueblo: ese es el picadillo el cárnico que le subieron el precio. Qué es eso, señores. ¡Qué asquerosidad! Y así quieren que el pueblo grite 'Patria o muerte'. Lo que hay que gritar cada día, y con más fuerza, es Patria y Vida. Esto es en Camagüey", expresó.
En enero una anciana de la capital denunció la mala calidad de los panes de la cuota, cuyo precio aumentó considerablemente tras el proceso de unificación monetaria.
La señora encontró que la mayoría estaban sucios y con manchas negras en la parte de abajo.
"Esto es un foco de infección", dijo.
El periodista oficialista José Morales también se refirió a la pésima calidad del pan de la bodega, pese a haber subido su precio veinte veces.
"El día 0, que debía marcar diferencias, nos deja el amargo sabor de continuar con el mismo perro con diferente collar", expresó.
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