El alcalde de Miami Beach, Dan Gelber declaró que está preocupado por la cantidad de personas que han llegado a su ciudad para festejar las vacaciones de primavera, en medio de la crisis del coronavirus que aún afecta a Florida.
"Tenemos un problema con demasiada gente que viene aquí para soltarse. Estamos preocupados. Es muy desafiante", declaró Gelber a la prensa estadounidense.
La alarma de Gelber se debe en particular a la variante del coronavirus que más se extiende entre los ciudadanos de Miami Beach, la cepa británica, que según estudios científicos es una de las más contagiosas.
"Si bien no hay forma de saberlo, debemos prepararnos para unas vacaciones de primavera descomunales", dijo Gelber a CNN. El alcalde indicó que están advirtiendo demasiada actividad en en esta etapa.
Si se incumplen las medidas de prevención de contagios, las vacaciones de primavera podrían terminar convirtiéndose en un gran desafío para la salud pública estadounidense. Los especialistas creen que Florida podría generar una nueva ola de propagación de coronavirus a otros estados, cuando regresen los vacacionistas a sus casa.
La oleada de "spring breakers" dejó los primeros altercados en Miami Beach este fin de semana. Las autoridades locales reforzaron la presencia de policías en las calles. Particularmente el viernes se vivieron momentos de mucha tensión.
El fin de semana, dos oficiales de policía fueron heridos y necesitaron ser hospitalizados. En Miami Beach se produjeron un centenar de arrestos, de ellos 42 por delitos considerados graves y se han incautado 13 armas de fuego en una semana.
"Si vienes aquí para romper nuestras reglas, comenzando por las reglas que vamos a rescatar, no queremos el arresto, pero si es necesario, lo haremos porque tenemos que tener cierto control sobre nuestro medio" dijo el alcalde de Miami Beach.
La policía de Miami Beach respalda el discurso de Gelber e insiste a la ciudadanía en que "recuerden vacacionar responsablemente o serán arrestados", según indicó el oficial Ernesto Rodríguez.
La llegada los spring breakers para disfrutar del calor y las playas de Miami Beach, a pesar de la violencia y las imágenes desagradables que deja en la ciudad, también ha servido para reactivar la economía. El sector de la hostelería, uno de los más importantes al sur de la Florida, ha sido duramente golpeado por la crisis del coronavirus, y tiene en los visitantes una oportunidad de resurgir, los profesionales del sector aseguran estar preparados para el reto.
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