El mandatario venezolano Nicolás Maduro anunció este domingo en TV que su país se sumará a la Fase III de los ensayos clínicos para los candidatos vacunales cubanos Soberana 02 y Abdala.
"Rumbo a la producción de la vacuna del ALBATCP", dijo el líder bolivariano en un programa dedicado a hacer un balance de la lucha contra la COVID-19 en ese país.
Serán 30 mil vacunas de Soberana 2, así como 30 mil dosis de Abdala, las que llegarán a Venezuela, según aclaró el dictador venezolano, quien también dio las gracias al mandatario cubano Miguel Díaz-Canel y a Raúl Castro, y calificó los candidatos vacunales de "extraordinarios".
"Si son de Cuba, son del ALBA, y si son del ALBA son de Cuba", aseguró Maduro.
Venezuela enfrenta actualmente una nueva ola de contagios de coronavirus. Este sábado alcanzó los 150.306 casos confirmados en medio de un crecimiento diario en el número de infecciones, según informaron las autoridades locales.
Por otra parte, ya más de 14 mil habaneros han recibido la primera dosis de Soberana 02 de los más de 44 mil que participan de la fase III de ensayos clínicos de Soberana 02. Este lunes comienzan también los ensayos para la vacuna Abdala en los territorios orientales de Santiago de Cuba, Guantánamo y Granma.
En días recientes fueron enviadas 100 mil dosis de Soberana 02 a Irán para realizar en ese país otra parte de la fase III del ensayo clínico.
El MINSAP cubano anunció a finales de febrero que Soberana 02 y Abdala entraban en fase final de ensayos clínicos y que a partir de marzo su efectividad sería probada en decenas de miles de voluntarios de La Habana, Santiago de Cuba y Guantánamo, aunque México e Irán también podrían participar en el ensayo.
Cuba, sin embargo, es el único país de Latinoamérica que aún no ha empezado una campaña de vacunación masiva, y ha apostado por desarrollar su propio proyecto y producir 100 millones de dosis antes de que termine el año, lo que permitiría atender sus necesidades internas (vacunar a 11,2 millones de cubanos) y exportar lo restante.
Los cuatro candidatos cubanos contra la COVID-19 son: Soberana 01 y Soberana 02, desarrollados por el Instituto Finlay; y Abdala y Mambisa, producidas por el Centro de Ingeniería Genética y Biotecnología de Cuba (CIGB). Los cuatro se basan en el enfoque de vacunas de subunidad proteica, que utilizan una proteína viral o parte de ella (en este caso el RBD, región de la proteína S del SARS-CoV-2) para inducir una respuesta protectora específica en la persona vacunada.
Este tipo de vacunas por ingeniería genética son las más tradicionales y seguras, además de tener la ventaja de que se conservan a una temperatura de 2 a 8 grados.
Hasta ahora, el candidato más avanzado es Soberana 02, una vacuna conjugada que combina la proteína RBD del virus con el toxoide tetánico, potenciando la respuesta inmune. Cuba ya ha desarrollado con éxito otra vacuna con este principio contra los haemophilus influenzae del tipo b, responsable de enfermedades como la meningitis, neumonía y epiglotitis.
Científicos cubanos aseguran que los resultados de Soberana 02 en la Fase I y II han sido buenos y ya han hecho públicos algunos informes de sus investigaciones. Se probará ahora la eficacia en un grupo de 42.000 personas en La Habana y otras 100.000 en Irán, en virtud a un acuerdo alcanzado con el Instituto Pasteur de ese país. México negocia participar también en el ensayo, según confirmó el canciller de ese país Marcelo Ebrard.
Por otra parte, la efectividad de Abdala se medirá en un grupo de decenas de miles de voluntarios en Santiago de Cuba y Guantánamo, provincias que junto a La Habana registran el mayor número de casos positivos de coronavirus en las últimas semanas.
Sobrana 02 requerirá en principio la administración de dos dosis, y Abdala evaluará si dos o tres dosis son las apropiadas de acuerdo a los resultados de eficacia que muestre el estudio fase III. Aunque está en una fase anterior de desarrollo clínico, Mambisa es otra de las apuestas del CIGB, con la peculiaridad de que su administración es por vía intranasal, en lugar de la habitual intramuscular, lo que facilitaría mucho la logística de la vacunación.
Está por verse si Cuba, que enfrenta a situación de crisis y agudo desabastecimiento y donde escasean los medicamentos de cualquier tipo y los artículos de primera necesidad, podrá cumplir sus propios pronósticos.
El PIB cubano cayó un 11% en 2020 debido a la pandemia y los recursos dedicados a la investigación en la isla también han caído. Tal vez por eso los recientes anuncios del gobierno han movido recientemente las expectativas de vacunación, inicialmente para primer semestre de 2021, hasta agosto.
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