Una cubana de Holguín fue la sensación de su comunidad al cosechar un enorme boniato de 31 libras en el patio de su casa.
El curioso suceso fue divulgado por el telecentro local, que mostró fotos del tubérculo, el cual que sacado de la tierra a los cinco meses de plantado.
"¡Un boniato gigante de 31 libras! Su dueña, Irma Requejo, vive en la Calle 24 # 218 e/ 7 y 9, por la cochera del hospital Lenin, aquí en la ciudad de Holguín", comentó Telecristal en su muro de Facebook, con varias imágenes del ejemplar en las manos de sus orgullosas dueñas.
Amigos y vecinos del lugar comentaron e hicieron bromas sobre la noticia, impresionados por el tamaño de la vianda.
"Si en tan solo un patio de una casa se pudo cosechar este boniato, imagínate si toda la tierra que tenemos en el territorio llena de marabú se pudiera preparar para alimentar al pueblo", expresó un ingeniero mecánico de Ciego de Ávila.
"Capaz y vayan a decomisarlo, como en Cuba todo es ilegal", dijo una joven.
"Ahora por curiosidad. ¿Cuánto cuesta ese boniato? Pregunto, como están disparados los precios del gobierno como tanto el de la calle", advirtió otra.
"Es casi del mismo tamaño que el que tiene Marino Murillo en la cabeza", comentó un holguinero.
"Según mis cálculos y teniendo en cuenta el precio del boniato, ¡Fácil, fácil le dan 5 motorinas por él!", bromeó otro.
En enero, un cubano cosechó un pepino de casi un metro en el patio de su casa, en Artemisa.
Según el reporte de la prensa local, el fruto medía unos 98 centímetros de largo y 26 de perímetro, y pesaba 3.6 kilogramos.
Su dueño, Ángel Reyes González, de 60 años, reveló al periódico Artemisa que lo había sembrado en octubre pasado con unas semillas que le regaló un vecino.
"Al principio ninguno se daba, luego nació este, y mire por dónde va", subrayó.
También a finales de 2020 un residente en Nuevitas, Camagüey, logró un pepino sacar un pepino de 23 libras que había sembrado detrás de un edificio multifamiliar.
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