El legendario boxeador cubano Orestes Pedroso falleció el jueves a los 73 años en Matanzas, su provincia natal.
El diario Granma informó que Pedroso murió debido a un infarto al miocardio, luego de varios años padeciendo de problemas en el corazón.
Campeón panamericano en los Juegos de México de 1975, el púgil cubano se hizo con la medalla de oro tras derrotar al estadounidense Leon Spinks, en la discusión por el título en la división de los semipesados.
En ese pelea el cubano venía de abajo en el marcador, pero alcanzó una inesperada victoria luego de que en el tercer asalto lograra superar a su adversario en un combate muy cerrado, tanto, que el peleador matancero terminó con una mano fracturada.
Según el portal digital Cuba Noticias 360, esa victoria le aseguró un lugar en la historia del pugilismo cubano e internacional a Pedroso, quien por otra parte no tuvo una extensa carrera internacional.
"La pelea con Pedroso del 25 de octubre de 1975 quedó en la memoria de aquellas generaciones de cubanos. Fue tal la repercusión que al matancero, con un yeso que le cubría su mano, le tocó el mérito de ser el primero en abrir la portezuela del avión con la delegación que regresaba de México, junto al campeón panamericano de la velocidad, Silvio Leonard, también severamente lesionado en una pierna", describió la nota.
Un año después, en las Olimpiadas de Montreal, Leon Spinks se desquitaría de los cubanos al derrotar al santiaguero Sixto Soria por RSC en el tercer round.
Curiosamente, Spinks también murió este año: en febrero, a los 67 años, por un cáncer de próstata.
La prensa cubana recuerda que Pedroso se caracterizaba en el ring por su gran fortaleza física y su golpeo constante, cualidades que el otorgaban gran autoridad en sus combates.
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