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El caricaturista cubano Francisco Pascasio Blanco Ávila, conocido por su nombre artístico: Blanquito, falleció este sábado en La Habana a los 90 años.
Blanquito fue fundador del semanario humorístico 'Palante' y desarrolló una extensa obra como dibujante y editor de las revistas de historietas 'Cómicos', 'Pablo' y 'Mi Barrio', por la cual fue reconocido con el Premio Nacional de Periodismo José Martí en 2018.
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De entre sus historietas más recordadas está 'Ay, vecino', que durante décadas publicó periódicamente en 'Palante', y que surgió como un "divertimento y un experimento, pues intentaba crear situaciones humorísticas limitadas a un solo escenario y dos protagonistas", según confesara en una entrevista al diario Granma.
Los lectores cubanos recordarán las viñetas de 'Ay, vecino', en las que dos hombres, uno gordo y el otro flaco, desde dos balcones coloniales, conversaban sobre la realidad actual del país.
"Muchas veces mis vecinos fueron los que me dieron los temas para mantener el espacio", dijo.
En una entrevista Blanquito subrayó que el rol del humor es "la crítica audaz a los problemas sociales, sin caer en vulgaridades ni en faltas de respeto".
"El premio mayor para un artista es que el público, o sea, para el que tú trabajas, te lo agradezca o con una palmadita en la espalda, o con un aplauso, o verlo publicado. Eso es el mejor, ver tu obra y que la gente te la analice, te quedó bien o te equivocaste, porque tenemos derecho a equivocarnos también. Todas esas cosas son las que hacen vivir la vida", dijo, citado por Cubaperiodistas.
Graduado en la Escuela Profesional de Periodismo Manuel Márquez Sterling en 1958, había publicado su primer dibujo diez años antes en la revista 'Fotos', cuando aún era un joven linotipista.
A lo largo de su vida realizó alrededor de 30 exposiciones personales y fue autor de múltiples diseños gráficos, así como de numerosos dibujos e ilustraciones para varias publicaciones.
Recibió más de 40 premios en concursos, salones y bienales nacionales e internacionales. Sin embargo, no llegó a alzarse con el Premio Nacional de Humorismo, a pesar de estar nominado hasta en cinco ocasiones.
También publicó 22 libros como el 'Pequeño mataburros humorístico ilustrado', 'El Caballero de París, la leyenda que camina', 'Bolívar en Martí' y '5 años, 5 meses y 5 días', los dos últimos de conjunto con su hijo.
Entre las condecoraciones que recibió está la Distinción por la Cultura Nacional, en 1996, y la Distinción Gitana Tropical, que le otorgó la Dirección Provincial de Cultura de La Habana en 2012.
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