El humorista cubano Ulises Toirac cuestionó la decisión del gobierno de no aceptar vacunas internacionales, mientras los casos de coronavirus se han multiplicado aceleradamente en los últimos meses.
Aunque aclaró que es "partidario del desarrollo de las vacunas cubanas contra la COVID" y que en lo personal prefiere ponerse las vacunas cubanas por "la confianza que le tengo al talento de nuestros científicos", preguntó "qué ha impedido que, paralelo a ese estudio, se aceptaran vacunas foráneas ofrecidas por los mecanismos internacionales".
"Si bien nuestro país es el primero de América Latina en desarrollar una vacuna autóctona, es uno de los últimos en aplicar un plan de vacunación masiva. Y ahí están los números. 10, 15, 12, 11, 18 al día. Y son muertos. La escalada de contagio crece a un ritmo impresionante y devastador", subrayó.
El artista recalcó, además, que a pesar de que las muertes eran terribles, las secuelas con las que quedan muchas personas que se infectan del virus, también lo son.
"Las secuelas que deja la enfermedad (para los que no se mueren), dejan otro renglón abierto para el futuro porque será otra población necesitada de más atenciones y medicamentos. Y no tengo que recordar el estado actual de esos 'departamentos'", puntualizó.
"¿No pudimos paliar algo de eso con vacunas de afuera en lo que desarrollábamos las nuestras, para no depender de lo que se ha probado en la práctica ha sido un reparto injusto y desigual? ¿No hubiéramos salvado una o dos vidas... ahorrado secuelas a unas decenas? En este caso, por mínimos que sean los números... se habla de vidas", cuestionó.
Cuba rechazó la iniciativa COVAX que impulsa la Organización Mundial de la Salud y que ha distribuido millones de dosis de vacuna en los países de América Latina.
"Cuba ha decidido no unirse a la iniciativa, por eso no tienen dosis” asignadas, explicó en conferencia de prensa en marzo Seth Berkley, director ejecutivo de Alianza de Vacunas Gavi, socia de la iniciativa.
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