Un cubano se quejó por una plancha de acero ubicada en el túnel de La Habana que está “creando un problema tremendo cuando los vehículos pasan por encima de ella”, según denunció al periódico Juventud Rebelde.
Renier Tiel Carrazana, residente en Cojímar y remitente de la queja, le preguntó al medio oficialista si para arreglar el problema habría “que lamentar un accidente”.
Carrazana declaró que debe cruzar el túnel diariamente en su moto para ir a su trabajo, y que en la salida del túnel a La Habana Vieja se encuentra la plancha de acero “de un grosor de diez milímetros o más”.
“Quizá sea apreciación mía, pero desde que esto comenzó la caída del agua en el centro del túnel ha aumentado. Yo paso en moto y me moja siempre. Solo alerto porque estoy seguro de que a la larga esa solución (la plancha) traerá muchos más problemas”, comunicó Carrazana al medio oficialista.
“¿Se imaginan que tengan que cerrar el Túnel de la Bahía para siempre, o que tengamos que lamentar un accidente?”, concluyó el cubano preocupado.
El túnel de la Bahía de La Habana, construido en los años 50 durante el gobierno de Batista es el mayor túnel de tránsito en Cuba, y conecta La Habana Vieja con el este de la ciudad.
Regularmente, el tránsito en el túnel se ve afectado por las inundaciones en épocas de lluvia, o por reparaciones que debido a su proximidad con el mar y su antigüedad.
El mal estado de las vías y la carreteras ha sido citado por las autoridades cubanas como una de las principales causas de accidentes de tránsito en Cuba, junto a la irresponsabilidad de los conductores, la falta de señalización vial, y la ingesta de bebidas alcohólicas al volante.
La plancha de acero denunciada por Carrazana no solo puede ser un peligro para los conductores y el tránsito, sino que desvirtúa la arquitectura y la visualidad de una obra declarada como una de las 7 maravillas de la ingeniería en Cuba.
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