“Yo fui delgado siempre y eso me cerró unas cuantas puertas, sobre todo en las categorías pequeñas. Fíjate que acabé siendo baja técnica en la EIDE porque se consideró que no estaba en condiciones de convertirme en atleta de alto nivel. Pero nunca bajé los brazos y ya ves, llegué a Capitalinos y la selección nacional a pesar de no haber podido rebasar la barrera de los 80 kilos”.
El otrora alero de Capitalinos y el equipo Cuba, Roberto 'El Flecha' Amaro, conversó con CiberCuba sobre su carrera y su actualidad, un aspecto que resumió con la siguiente frase: “Acá en Miami estoy muy bien, como mismo lo estuve antes en Uruguay. No soy rico, pero llevo una vida decorosa".
Acerca de sus inicios afirmó que "yo llegué al baloncesto en una época donde había muchos jugadores de gran categoría, varios de ellos en la posición mía, así que tuve que trabajar cantidad para poder enfrentar ese reto".
A seguidas, evocó aquellos años de la Liga Superior, cuando con grandes problemas para transportarse, entrenar y alimentarse, los atletas del patio consiguieron elevar el baloncesto a los primeros niveles de atención en el país.
Al referirse a la rivalidad vivida contra jugadores de otros equipos -como por ejemplo, el villaclareño Yudi Abreu-, apuntó que “en el terreno jugábamos a full, pero fuera de él éramos amigos. Era una confrontación sana. Cuando se acababan los juegos, lo mismo nos tomábamos una cerveza que un refresco. Ha pasado el tiempo y seguimos manteniendo contacto”.
'El Flecha' dedicó un aparte al recién desaparecido Roberto Carlos Herrera, quien fuera su compañero de filas en todos los equipos donde militó en el máximo nivel. “Él era 100 por 100 en lo deportivo y lo humano. Era la cabeza pensante del equipo y se nos fue, pero ya nos reencontraremos”.
Por último, expresó: "Muchos jugadores emigran porque los hacen emigrar. A mí por ejemplo, me botaron del Cerro Pelado con la justificación de que ya no querían allí a nadie de los Capitalinos que tanta gloria le habían dado a La Habana y a Cuba. Cosas así pasaron por ponerte dos ejemplos con la gran Leonor Borrell o el pelotero Frank Camilo Morejón”.
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