Luego de dos derrotas donde lució sobre la cancha y tras la dramática pérdida de su estrella Christian Eriksen, Dinamarca se hizo justicia y avanzó a los octavos de final de la Euro como segunda de la llave B, donde Bélgica respondió a las expectativas y se quedó con el liderato.
Forzados a ganarle a Rusia, los daneses golpearon al minuto 38 con un golazo de Mikkel Damsgaard (de los mejores del campeonato), quien recibió fuera del área y superó al meta Safonov con un disparo espectacular.
Pero a los vikingos no les bastaba con ese resultado estrecho, y en el 59’ un error de la defensa rusa fue aprovechado por Yussuf Poulsen para poner el 2x0 en la pizarra.
Al rato las cosas se pusieron feas cuando Rusia recortó distancias desde el manchón penal por mediación de su capitán Artem Dzyuba, mas los daneses –aupados por el público delirante de Copenhage- garantizaron el éxito en el 79’ con un trallazo de Andreas Christensen que hizo estéril la dobe parada previa del portero rival.
Por último, Joakim Mahle sentenció la goleada cerca del pitazo decisivo y convirtió el graderío en manicomio.
Antes de hoy, Rusia (o su predecesora, la URSS) había vencido a Dinamarca en diez de doce partidos.
En cuanto al otro desafío del grupo, Bélgica batió 2x0 en San Petersburgo a Finlandia, dejándola en el tercer lugar y con la incertidumbre de si alcanzará o no el boleto de supervivencia.
Las dianas de los Diablos Rojos fueron al minuto 74 (autogol del cancerbero Lukas Hradecky tras el remate al larguero de Vermaelen) y al 81’, a través de Romelu Lukaku.
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