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El Partido Conservador de Canadá emplazó al primer ministro Justin Trudeau a pronunciarse sobre la crisis de Cuba y lo invitó a abandonar su manifiesta admiración por el régimen chino y el difunto Fidel Castro, con una declaración de su líder Erin O'Tolee y sendas declaraciones de un senados y dos congresistas.
Hasta el momento de redactar esta nota, el gobierno canadiense mantiene silencio sobre el clima de protestas en Cuba, reprimidas con violencia por el ejecutivo de Díaz-Canel,
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"Los Conservadores de Canadá se solidarizan con el pueblo de Cuba que se manifiesta pacíficamente para abogar por las libertades democráticas y las necesidades básicas como la comida, el agua y las medicinas, mientras el país se enfrenta a un aumento de los casos de COVID-19 y a la peor crisis económica desde la década de 1990", reza la declaración, que califica al gobierno de la isla de "despiadado" y comisor de terribles actos de opresión, asesinato y tiranía.
La lucha por la libertad del pueblo cubano es importante porque merece vivir libre de opresión, con acceso a derechos democráticos básicos y a la prosperidad económica, aseveró el Partido Conservador, que lamentó la actitud del premier Trudeau, que "ha expresado un fuerte apoyo al régimen castrista, refiriéndose en una ocasión a Fidel Castro como "un legendario revolucionario y orador" que tiene una "tremenda dedicación y amor por el pueblo cubano".
La nota del Partido Conservador no hace referencia a los ataques sónicos sufridos por diplomáticos de Canadá y Estados Unidos en La Habana, sobre los que el presidente Joe Biden ha encargado una investigación rigurosa a una comisión ad hoc, mientras que el gobierno canadiense ha concedido un perfil bajo al asunto que puede acabar en los tribunales.
El diputado Pierre Marcel Poilievre, del opositor Partido Conservador, emplazó al primer ministro de Canadá Justin Trudeau a pronunciarse sobre la crisis de Cuba, que vive protestas antigubernamentales desde este domingo, pese la dura represión desatada por las autoridades.
Trudeau dijo que admiraba la "dictadura básica" de China y llamó a Fidel Castro revolucionario legendario,recordó Poilievre, que se desempeña como portavoz en la Cámara de los Comunes, en los ámbitos de Empleo e Industria.
El primer ministro sigue creyendo en esas cosas, por eso no condena la represión socialista contra el pueblo cubano, concluyó Poilievre, que se desempeñó como ministro del gobierno canadiense, entre 2013 y 2015.
El pronunciamiento de Pierre Poilievre sigue a los de sus compañeros de partido, el senador Leo Housakos y el también diputado Michael Chong, que han combinado la críticas al gobierno cubano con emplazamientos a Trudeau para que condene la represión en Cuba.
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