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A casi dos semanas de las protestas multitudinarias que sacudieron Cuba, los registros compilados por organizaciones independientes confirman más de 600 personas detenidas, desaparecidas o bajo medida cautelar a la espera de juicios.
La organización Cubalex ha registrado más de 620 casos hasta este jueves, algunos ya verificados y otros en proceso de verificación. La cifra fue compartida por la organización internacional Human Rights Watch y el senador cubanoamericano de Florida, Marco Rubio.
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No obstante, Cubalex incluye en su último reporte oficial del pasado 21 de julio, los casos ya corroborados de las 584 denuncias conocidas hasta este jueves, número que ha ido en ascenso en las últimas 24 horas.
“Nuestro listado preliminar de detenidos en Cuba recoge 584 denuncias. Desglosamos datos: en detención, verificados: 150; en desaparición forzada: 40; en libertad: 91; mujeres: 112; hombres: 472”.
Cubalex, entidad sin ánimo de lucro, se ocupa de promover los derechos humanos en Cuba, y contabiliza y verifica las desapariciones, detenciones y excarcelaciones de manifestantes que el pasado 11 de julio tomaron las calles de todo el país.
Por su parte, Cuba Decide, la organización que lidera la opositora Rosa María Payá, registra al menos 667 personas detenidas o desaparecidas en total, de ellas solo 141 han sido liberadas, mientras que 526 continúan en prisión o sin que se conozca sus paraderos.
Hasta el momento, los tribunales cubanos han procesado al menos a 12 personas en juicios sumarios celebrados a puertas cerradas y sin derecho a defensa. Los 12 jóvenes recibieron condenas de entre 10 meses y un año de cárcel por documentar las protestas o participar de ellas.
Dentro de las personas enjuiciadas el pasado miércoles se encuentra Ányelo Troya, autor de las imágenes clandestinas filmadas en Cuba para el clip Patria y Vida.
Troya se unió a la manifestación pacífica para documentar los hechos con su cámara, y allí fue detenido violentamente y trasladado a los calabozos de 100 y Aldabó, donde lo mantuvieron incomunicado durante días.
“Si esto es lo que le piden a Anyelo por tirar fotos y le están sembrando un caso de desorden público que muchas veces es una multa y ya, que se puede esperar del que marchó, del que tiró una piedra o viró una patrulla”, dijo en redes sociales Raydel Cruz, primo del cineasta.
Ányelo fue sentenciado a un año de prisión por el delito de desorden público.
También fueron liberados la adolescente Amanda Hernández Celaya, de 17 años, quien filmaba con su teléfono las protestas; y los periodistas de La Hora de Cuba, Henry Constantín Ferreriro e Iris Mariño, así como la diseñadora Neife Rigau.
Los cuatro esperan en sus casas, bajo medida cautelar, a ser juzgados por un tribunal bajo los supuestos cargos de desorden público e incitación a las masas.
La Televisión cubana, por su parte, dedicó el pasado martes varias horas del horario de máxima audiencia a negar las evidencias de desapariciones, detenciones ilegales, torturas y vejaciones a manifestantes.
Los medios estatales divulgaron la versión oficial de los hechos, según la cual "en Cuba no existen personas desaparecidas" a pesar de los listados de cientos de personas arrestadas o en paradero desconocido que se ha conseguido acopiar y verificar.
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