Un total de 35 embarazadas o puérperas fallecieron por COVID-19 en Cuba desde abril a la fecha. A ello se suma que 4,536 gestantes y puérperas han sido diagnosticadas con el virus y 320 han ingresado en las unidades de cuidados intensivos.
Se trata de un dato abrumador si se tiene en cuenta que no falleció ninguna entre marzo y diciembre de 2020, 110 enfermaron y solo una paciente estuvo grave por ese motivo, según datos difundidos por Noemí Cauza Palma, jefa nacional del Programa de Atención Materno Infantil (PAMI), en reunión gubernamental de este martes.
El pasado año hubo provincias que no reportaron el contagio de ninguna embarazada, como es el caso de Mayabeque, Cienfuegos y Granma, panorama muy diferente al de los últimos meses.
En 2021 se han diagnosticado casos de gestantes o puérperas con COVID-19 en todo el territorio nacional, siendo las provincias de La Habana (1,425); Matanzas (719); Santiago de Cuba (468); y Guantánamo (221), las de mayores cifras. La mayor incidencia de contagios se registra en Ciego de Ávila (13,4%); Guantánamo (10,1%) y Camagüey (9,4%).
La primera gestante falleció en abril y desde entonces la cifra no ha dejado de aumentar. En julio ascendió a 23, y en agosto ya se han producido 6 defunciones.
Especialistas cubanos estiman que, a partir de la experiencia adquirida en la isla en los últimos meses, en los casos de mortalidad constituyen factores de riesgo la edad materna por encima de los 30 años, una edad gestacional superior a las 26 semanas, la obesidad, la hipertensión arterial y la diabetes.
Al presentar una caracterización clínica de las gestantes y puérperas que han fallecido, se especificó que el 97% de las estudiadas tenían más de 26 semanas de gestación; la edad oscilaba entre los 20 y 38 años; el 34% padecían comorbilidades asociadas como asma bronquial, epilepsia, sicklemia y Lupus Eritematoso; y el 37% de las gestantes o puérperas fallecidas tuvieron troboembolismo pulmonar.
Las tasas más altas de mortalidad han tenido lugar en Matanzas, Ciego de Ávila, Guantánamo y Mayabeque.
Medidas en Cuba ante la alta mortalidad en Cuba de embarazadas y puérperas por COVID-19
Como parte de las acciones que se implementan para proteger a este grupo poblacional de elevado riesgo, la Jefa Nacional del PAMI dijo que se decidió ingresar en hogares maternos a todas las gestantes que, con 26 semanas de embarazo, presenten factores de riesgo.
Tampoco se permitirá el ingreso domiciliario de ningún paciente sospechoso o positivo de bajo riesgo si en el hogar conviven gestantes o puérperas.
Otras medidas son la vacunación con los candidatos cubanos contra el coronavirus (el 89,1 % ha ya recibido la primera dosis ) y emplear el Nasalferón en gestantes o puérperas una vez que sean declaradas contactos de casos positivos.
La directiva de salud subrayó que estar embarazada aumenta los riesgos de complicaciones por el COVID-19 porque el sistema inmunológico está más comprometido, y subrayó que el aparato respiratorio sufre transformaciones, sobre todo al término del embarazo, momento en que el crecimiento del útero desplaza al diafragma hacia arriba.
En la conferencia de este miércoles, Francisco Durán García sumó dos muertes maternas más, lo que eleva la cifra de decesos en 2021 a 37.
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