Los cienfuegueros denunciaron la mala calidad del arroz que llega a las bodegas para la venta por la libreta de abastecimiento, mientras Cuba atraviesa una aguda crisis de alimentos.
En medio de la pandemia del coronavirus, y la escasez de comida, a los residentes en Cienfuegos les toca consumir un arroz cubano que se caracteriza por estar lleno de cáscara (machos), piedrecitas, granos partidos, y hasta frijoles.
"Los dos meses anteriores vino con lo que se conoce como el gusano del arroz. Este mes con unos granitos que parecen frijoles, pero son mucho más pequeños, con machos y muy partido", denunció una cienfueguera.
Un reportaje del Telecentro PerlaVisión indicó que cada mes la calidad de la cuota de arroz varia en dependencia de si se comercializa una variedad de producción nacional o si el cereal es importado.
Este producto es imprescindible en la comida cubana. Las irregularidades en la calidad generan molestias en la población pues, no solo deben consumir un arroz malo, sino que el tipo de cocción de estos diferentes granos varia y se necesita ser muy experto cocinero para lograr un arroz correcto para el consumo.
Una funcionaria entrevistada por la prensa oficialista de Cienfuegos aseguró que no han tenido ninguna queja con respecto a la calidad del arroz. La mujer comentó que cuando en una bodega la población hace una crítica "no se le obliga a nadie a comprar ese producto" sino que se separa el arroz y se verifica si es bueno o no y se procede a cambiarlo.
"Hay un arroz que viene del sur del Jíbaro, de Sancti Spíritus que trae un poco más de calidad y hay uno que viene de "La Paquita", de Aguada de Pasajeros (Cienfuegos) que aunque también tiene calidad, es menor", dijo un funcionario entrevistado.
La población pidió al gobierno cubano que verifique la calidad de la producción nacional de arroz y que eliminen aquellos lotes del cereal que no son aptos para el consumo humano.
Las críticas a la calidad de los productos nacionales se aprecian también en aquellos que se comercializan en moneda libremente convertible (MLC).
La pasada semana un cubano denunció haber comprado en la tienda del Hotel Meliá Cohiba un un paquete de café en granos que tenía dentro pequeñas puntillas y papelitos. El descubrimiento fue hecho en un envase de 500 gramos de la marca de producción nacional Guantanamera, que se comercializa por valor de 7 dólares.
Otro producto que ha generado quejas en las redes sociales de los cubanos es el frijol chino que entregaron en las bodegas tras recibirlo como donación desde Venezuela.
Los paquetes son de 1 kilogramo y se entregan dos por núcleo. Vienen desde diferentes estados venezolanos y en su interior, además de una mezcla de variedades del frijol con granos partidos, traen piedras, ramitas, hojas secas y otros desechos que obligan a escoger los preciados granitos cuidadosamente.
El sabor de este tipo de frijoles no es del agrado de la mayoría de los cubanos que prefieren consumir el tradicional grano negro, pero una libra de este producto en Cuba cuesta entre 80 y 100 pesos.
En junio la libra de arroz en el mercado negro subió hasta 70 pesos en Cuba. Un reportaje Juventud Rebelde indicó que los cubanos deben recurrir al mercado informal para adquirir arroz a precios elevados, ante la escasez que muestran los establecimientos del Estado.
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