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Residentes en el poblado Nicaro-Levisa, del municipio holguinero de Mayarí, denunciaron la depauperación de esa localidad "de escombros y ruinas" y dijeron que la realidad allí es "impactante, triste, desesperante".
En sendas publicaciones en Facebook dos residentes de esa zona extractiva donde se encontraba el mayor yacimiento de níquel de Cuba, afirman que el pueblo se está muriendo y con él mucha de su gente, que aportó "millones de filosos USD (dólares) al país" a base del mineral.
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"Nicaro-Levisa ha pasado a ser uno de esos tantos pueblos fantasmas consumidos por una ineficacia en la gestión de gobierno a nivel local", subraya uno de los post.
Asimismo, menciona que la ineficiencia del gobierno es tal que llevan cuatro años reparando la terminal, hay un centro comercial en ruinas con bodegas, barbería, peluquería, pizzería, correo, y tiendas TRD, y no hay calles transitables.
Con el testimonio gráfico de casi una veintena de fotografías, los internautas refieren que el policlínico local está devastado, los parques infantiles desmantelados, hay una pésima gastronomía y una mala gestión de la pandemia, con desastrosos centros de aislamiento.
"De ser un pueblo próspero y agradable ha pasado a ser un sitio donde no se ve por ninguna parte aquello que ahora está muy de moda "la cultura del detalle". Es un lugar feo, sí FEO (duele escribirlo porque allí nací y vive toda mi familia y amigos). En fin, en Levisa, a aquello que dicen es lo último que se pierde (la esperanza) ya le hicieron el velorio", expresó en su post el usuario identificado como Jorge Luis Ríos García.
Asimismo el residente de ese poblado Yordanis González Durán manifestó su preocupación por el futuro de sus hijos en un pueblo convertido en "escombros y ruinas", luego de que dejaran de funcionar las plantas procesadoras de níquel.
Su post, dirigido a los funcionarios del Partido Comunista de Cuba y del gobierno municipal, contiene imágenes de las ruinas en que viven los pobladores de Nicaro-Levisa, y afirma que ellas muestran "gráficamente" sus sentimientos y su enojo ante "semejante atrocidad".
Dijo que las máximas autoridades del territorio y del país le han dado la espalda a "un pueblo que por tantas décadas aportara millones de dólares a nuestro país", y se preguntó "¿cuántos años más tengo que esperar para ver mi pueblo florecer?".
Cuenta que su papá trabajó por casi 40 años en la industria del níquel, "gastando su vida y su juventud en la empresa y lo único que recibió en tantos años de trabajo fue un televisor Panda que ya casi tiene 20 años, y con la chequera que le pagan de jubilación no puede soñar ni con comprarse un par de zapatos", explicó.
"Yo no quiero que mis hijos gasten su vida cómo la gasto mi papá, como la estoy gastado yo o como la gastó mi comunidad, que ya solo quedan sombras de lo que un día fue", dijo el internauta.
Las imágenes son impactantes, propias de un pueblo en ruinas, pero similares a la de decenas de poblados cubanos que hoy carecen de interés para las autoridades y de los servicios más básicos para garantizar a sus habitantes una vida digna y de calidad.
"Q triste se ve todo, parece un pueblo fantasma, tan lindo que era Levisa", "La verdad es muy triste ver la situación que hay con las instalaciones de Levisa y Nicaro, sería importante balancear las obras que se han erigido en el municipio Mayarí (...) Lo merece ese pueblo que tanto aportó para toda Cuba", son algunos de los comentarios.
Las zonas mineras de Nicaro y Levisa pertenecen al municipio holguinero de Mayarí. Levisa fue creada en 1962 con la construcción de 402 viviendas en lo que era el campo de caña No. 49 de la United Fruit Sugar Company.
Nicaro, conocido como la cuna del níquel cubano, tiene una infraestructura basada en las empresas de la Unión del Níquel pertenecientes al Ministerio de la Industria Básica (MINBAS), dedicadas a la producción de níquel.
Estas empresas constituyen la base principal de fuente de empleo para las personas de ese territorio, eminentemente minero.
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