Dos trabajadores de la Central Termoeléctrica “Máximo Gómez”, de Mariel, en la provincia de Artemisa, sufrieron lesiones graves luego de un accidente en la instalación el pasado 4 de octubre.
El incidente ocurrió en la subestación Mariel 220 de la termoeléctrica, donde resultaron heridos Alejandro Canosa Insua, jefe de la brigada de operadores, y Osmany Cabrera Deybe, operador de turno.
La Unión Eléctrica de Cuba no ha informado del hecho y se desconocen los detalles. Una publicación del miércoles de la Empresa de Construcciones de la Industria Eléctrica (ECIE) en Facebook, señala que las lesiones fueron por quemaduras.
Apunta, además, que los trabajadores se encuentran ingresados desde el mismo lunes en el hospital “Calixto García” de la Habana “donde reciben una atención muy esmerada”.
“Están dados como de estado grave crítico con peligro para la vida. Canosa con el 78% y Osmany con el 44% del cuerpo con quemaduras de tercer grado, respectivamente”, indica la nota.
Según la publicación, en el parte médico del 6 de octubre, Canosa se reporta en estado crítico extremo con peligro para la vida, con infección profunda, inflamación y heridas muy profundas, mientras que a su colega se le descubrió una infección en las lesiones, ante lo cual se le dobló la dosis de antibiótico.
Este último paciente se mantiene en estado crítico extremo y con peligro para la vida, aunque se encuentra estable, alimentándose bien, con buena orientación y consciente, de acuerdo con el reporte.
La información fue confirmada por el diario cubano independiente 14yMedio, que logró contactar a familiares de los trabajadores accidentados, pero no aportaron más pormenores sobre los mismos.
Raquel Vilela, tía de Canosa, dijo este domingo al portal de noticias que su sobrino se hallaba “estable y de buen ánimo”, recalcando que contaba con “la mejor atención”. Vilela desconoce el contexto del accidente y si se trató de “negligencia o mala manipulación”, admitiendo que la familia ha tenido que informarse por terceros a falta de una comunicación oficial de la empresa.
La Central Termoeléctrica “Máximo Gómez” fue construida con ayuda de la Unión Soviética, como parte de los convenios entre la isla y el bloque socialista en 1960.
En un inicio, contaba con cuatro bloques de 50 MW/h y otros 4 bloques de 100 MW/h. El centro abastece fundamentalmente a las provincias de La Habana, Artemisa y Pinar del Río.
Durante las últimas semanas, Cuba ha vivido una crisis energética con extensos apagones en varios territorios.
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