Las autoridades de la agricultura de la provincia Granma realizaron una feria para la comercialización de productos de carne de res destinados al sector del turismo y las tiendas en dólares.
En medio de la peor escasez de alimentos que atraviesa el país, cuando la gran mayoría de la población lleva años sin probar la carne vacuna, se realiza esta expo feria a la que se convocaron a las empresas estatales del territorio granmense.
Una de las participantes fue la Empresa de Genética y Cría Manuel Fajardo, del municipio Jiguaní, que mostró una diversidad de partes de la res que muchos cubanos añoran tener en su mesa, como cañada, riñonada, filete, ossobuco, embutido y distintos tipos de boliche.
Según una información de la emisora Radio Jiguaní, la entidad avanza en la negociación con clientes de la rama turística y concretó un negocio con la Empresa Caracol, que se especializa en la comercialización de productos en tiendas de los principales polos y zonas de interés turísticos.
La publicación de la emisora oficialista originó numerosas críticas en las redes sociales.
"¿Filete? ¿Bola de cañada? ¿Bistec de palomilla? ¿Ossobuco? ¿Paleta de carnero? ¿Cerdo mamón? ?Bacon? ¿Pollo fresco? ¿Pollo ahumado? ¿Tasajo? ¿Todo eso se produce en Granma? Quiero saber quién de ustedes encuentra esto en la canasta básica de la bodega con 'justicia social'", cuestionó un usuario identificado como Manuel Milanés en su cuenta de Twitter.
"Siempre ha sido así", le respondió otro usuario de la red. "En FIAV les pregunté a los representantes de Nestlé dónde yo encontraba los helados a granel que exponían en la feria, porque nunca los había visto. Me dijeron dieron toda una justificación absurda. Luego los compré en el mercado negro de los hoteles de Varadero", recordó.
"¿Y qué son esas ferias? ¿Para el pueblo o para un grupito?", inquirió una madre de familia.
"Yo no sé ni lo que hay ahí. Nunca lo he visto", afirmó un profesor universitario.
"¿Y los huesos para la bodega del pueblo? Está bueno para llegar ahí y quitarle todos esos paquetes, delincuentes", añadió Milanés en otro tuit.
"Un abuso y un chantaje subir esas fotos a las redes, eso sí es incitar al odio, eso sí es un atropello, eso sí es vandalismo, saben que el pueblo de Cuba lo que tiene para comer son los huesos de esas reses, y si con suerte lo consiguen. Hablo con base, soy cubano y vivo en Cuba", denunció un internauta.
"Tienen la desfachatez de presentar todo eso como un logro, mientras el pueblo hace largas colas y los niños siguen sin leche", subrayó otro.
"Para los cubanos son las tripas, las cabezas de la langosta, huesos que están hasta verdes, con moscas. O sea, lo que ellos jamás comen", aseguró una joven.
En julio pasado ocurrió una triste escena en Gibara, municipio de Holguín, cuando varias personas se fueron a las manos en una cola para los tickets para comprar carne de res por la libre.
Un lector que envió a CiberCuba el video del suceso, detalló que había una cola inmensa para coger los tickets y debido al desorden y a la indisciplina, el empleado del local dijo que no iba a repartirlos.
"Cuando se iba, el pueblo le cayó detrás y se le cayeron los tickets. Y ya ven en el video lo que se formó para recogerlos del suelo. Parece una piñata de un cumpleaños", detalló el autor del video, en el que se veía a la gente tirada en la calle tratando de recoger los papeles.
"Segundos después se formó la piñacera (SIC), porque el repartidor tiró los turnos", añadió.
En Granma, el precio de venta de la carne de res "liberada" alcanzaba en junio los 80 pesos la libra.
Después que el gobierno autorizara a los ganaderos a comercializar la carne y la leche de sus reses, los primeros animales que se sacrificaron por sus dueños en Camagüey se vendieron a 60 pesos la libra.
Pocos días después, en el territorio oriental, el mismo alimento llegaba a los 80 pesos por libra, y a pesar del alto precio la oferta se quedó muy por debajo de la oferta.
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