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Agentes de la Guardia Nacional mexicana reconocieron haber disparado este domingo contra una camioneta en la que se trasladaban 13 migrantes desde Chiapas, México, con saldo de dos pasajeros heridos y uno fallecido. La víctima mortal, identificado como Cristóbal “N”, era de origen cubano.
Los primeros reportes se limitaron a constatar la existencia de una víctima baleada en el municipio de Pijijiapan, ejido Echegaray.
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De acuerdo con la información posterior, pudo saberse que los disparos ocurrieron cuando el chofer del vehículo no quiso detenerse en un retén y arremetió contra los soldados. En el vehículo, además del conductor, se encontraban ocho cubanos, un brasileño y tres migrantes originarios de Ghana.
En un mensaje oficial, la dependencia señaló que a través de la Fiscalía de Distrito Istmo Costa se abrió una carpeta de investigación por el delito de homicidio calificado “contra quien o quienes resulten responsables por la muerte de una persona del sexo masculino, originario de la República de Cuba”.
La justificación de la GN es que el conductor de la unidad intentó embestirlos y “al verse en riesgo inminente su integridad”, accionaron sus armas para detener el vehículo.
Tras conocer la noticia, agentes de la Fiscalía arribaron al tramo de terracería que conduce a la colonia El Progreso, donde se encontraba una camioneta tipo pickup, color blanco y doble cabina, con placas de circulación del estado de Chiapas.
En el interior se encontró el cadáver del migrante cubano, cuyo cuerpo registraba lesiones provocadas por arma de fuego.
Un equipo, conformado por peritos en criminalística de la FGE, aplicó el protocolo de actuaciones para la investigación del delito de homicidio en el estado y llevó a cabo las primeras diligencias y el levantamiento de indicios.
La camioneta, junto con un arma de fuego larga, color negro, abastecida con un cargador, quedaron aseguradas.
El ataque fue condenado por defensores de derechos humanos y confirmado por la Fiscalía General del Estado (FGE).
El Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano denunció el asesinato. A través de un comunicado, firmado por una veintena de organizaciones defensoras de derechos humanos de Estados Unidos, Centroamérica y México, la ONG declaró que el ataque forma “parte de la situación general de violencia contra las personas migrantes con necesidades de protección internacional”.
“El despliegue de elementos de la Guardia Nacional en la Frontera Sur de México ha tenido como consecuencia violaciones a derechos humanos de personas en movilidad de manera sistemática”, deploró el colectivo, exigiendo que termine “la represión contra las personas migrantes”.
También afirmaron que se ha “documentado y denunciado los abusos, la represión y el uso ilegítimo de la fuerza por parte de elementos de la GN hacia personas migrantes”.
No es el primer caso de migrantes cubanos que pierden la vida en México tratando de llegar a la frontera norteamericana.
A comienzos de octubre, otro cubano falleció y otros dos resultaron heridos durante un ataque armado que se produjo en la ciudad mexicana de Cancún. Testigos del incidente revelaron que los atacantes viajaban a bordo de un taxi y efectuaron una veintena de disparos contra tres hombres que estaban conversando cerca de un auto.
En mayo, Cristian San Martín Estrada, un migrante cubano de apenas 19 años, fue asesinado a tiros en Ciudad Juárez. El joven estaba inscrito desde 2019 en el programa de Protocolos de Protección a Migrantes (MPP), en espera de que un juez estadounidense resolviera su solicitud de asilo.
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