"Ahora tenemos que estar unidos, más allá de nuestra visión del mundo,de nuestra manera de ver la distribución de la riqueza, la justicia social, etcétera. Debemos estar todos juntos porque ahora no somos ni de derecha ni de izquierda, somos un pueblo que está abusado", declaró ese jueves en su perfil en Twitter la artista activista cubana Tania Bruguera.
Bruguera, quien fue una de las figuras líderes de la protesta del pasado 27 de noviembre frente al Ministerio de Cultura, ha mostrado su apoyo en múltiples ocasiones a la Marcha Cívica por el Cambio del próximo 15 de noviembre, al grupo Archipiélago y al actor y dramaturgo Yunior García Aguilera.
También ayer comentó que el hecho de que el pueblo cubano saliera a las calles el pasado 11 de julio daba licencia al mundo entero para poder cuestionar lo que está sucediendo en la isla y que por eso era tan importante la marcha del 15 de noviembre. "Las manifestaciones reflejan de una manera inequívoca lo que está sucediendo y el sentir del pueblo", expresó.
Por otra parte, la prestigiosa activista, recién elegida por la Universidad de Harvard para integrar su claustro de profesores, ha promovido una intensa campaña de boicot a la XIV Bienal de La Habana en solidaridad con los presos políticos y a favor de la libertad de expresión, y ha logrado involucrar artistas internacionales como el brasileño Cildo Meireles y la yugoslava Marina Abramović, entre otros.
El boicot, que ha sido considerado por el ministro de Cultura de Cuba Alpidio Alonso como una "campaña contrarrevolucionaria", es el resultado, de acuerdo con Bruguera, del agotamiento de artistas y activistas que han intentado concientizar a las instituciones cubanas de la necesidad de cambiar su comportamiento, pues en distintas ocasiones se han propuesto diálogos y negociaciones que los funcionarios han frustrado con excusas.
"Quien va a inaugurar la Bienal es el ministro de Cultura, el mismo que propició un zarpazo a un artista y que vio como la policía se llevó a un grupo de artistas delante suyo y no utilizó su poder para paralizar una situación en extremo violenta", declaró Bruguera este jueves en Twitter para explicar las razones del boicot.
A su juicio, decir no a un evento cultural no es negarlo sino "hacer un llamado de atención a quienes lo crean y a quienes participan de que hay cosas que uno debe valorar más en ciertos momentos de la vida que el arte/carrera y es el hecho de estar al lado del pueblo y de la libertad".
Mientras más se acerca la fecha de convocatoria a la manifestación convocada por Archipiélago, más aumenta la tensión, la polémica y la hostilidad de las autoridades cubanas. Los moderadores de Archipiélago más visibles han sido acosados, detenidos, interrogados y amenazados tanto por la Seguridad del Estado como por la Policía Nacional Revolucionaria. También la Fiscalía General de la República ha advertido que procesará a las personas que insistan en promover la Marcha y participen en la misma.
Las recientes declaraciones de Bruguera responden a un contexto cada vez más polarizado, en especial por los discursos de odio que promueve. "Lo importante ahora no es si estás a favor o en contra de un sistema económico, de entidades y de justicia, sino que somos un solo pueblo y eso incluye a quienes viven fuera de Cuba. Los de adentro y fuera, todos tenemos el derecho a decidir el futuro de nuestro país", afirmó Bruguera.
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