Los perfiles en Facebook de la activista Daniela Rojo, moderadora de Archipiélago, y el cineasta Osmel González Darlington, quienes se encuentran detenidos desde el pasado 12 de noviembre, han sido completamente eliminados.
Hasta ahora se desconoce si las autoridades les forzaron a eliminar sus cuentas o si las mismas fueron vulneradas, pero el hecho es que no se encuentran en la red social, desde donde solían realizar denuncias de violaciones de derechos humanos y compartir contenidos críticos al régimen.
Rojo, quien se encuentra en desaparición forzada aún, es madre de dos niños y ha sido en los últimos meses blanco de acoso por parte de las autoridades cubanas. Antes de esta última detención enfrentó varios interrogatorios y amenazas de cárcel por promover la Marcha Cívica por el Cambio del 15 de noviembre. Además, fue una de las personas detenidas en las protestas antigubernamentales del 11 de julio pasado. Entonces pasó casi un mes en prisión.
En el caso de González, de acuerdo con los registros del grupo Justicia 11J y Cubalex, su detención se dio a conocer por una publicación de una amiga, quien contó que el joven artista había sido citado varias veces la semana anterior por la Seguridad del Estado para una supuesta entrevista. "Todas esas veces él desestimó las citaciones por no cumplir con lo reglamentado", decía.
Justicia 11J agrega que, a las 11 am del domingo 14, su contacto de emergencia recibió una llamada en la que se le hizo saber su paradero y causa de detención: presuntamente detenido por desacato en la prisión de Aguilera. "Por la falta de información veraz del que hizo la llamada, se asume como llamada apócrifa. En la noche la madre fue notificada de que sí está en Aguilera", precisa su registro.
En los últimos tres días, Cubalex ha registrado más de 160 acciones violentas motivadas políticamente contra ciudadanos cubanos. Por otra parte, la lista de detenciones, desde el 3 de noviembre hasta la actualidad, alcanza la cifra de 55 personas. De ellas, al menos días se encuentran en desaparición forzada.
El despliegue militar realizado por el régimen en los días previos a la Marcha Cívica por el Cambio, así como la represión contra activistas, artistas, periodistas independientes y familiares de presos políticos, impidieron las manifestaciones planificadas en distintas provincias. No obstante, Archipiélago ha convocado a mantener las jornadas hasta el próximo 27 de noviembre.
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